¿Son seguras las ferias de verano?
- Todos los años se producen accidentes en las ferias, y algunas víctimas denuncian hallarse desprotegidas
- Los feriantes se niegan a emitir tickets que sirvan como comprobante, aunque aseguran que se harían cargo de los daños
- La policía trata de evitar altercados y atiende a los damnificados en las ferias
En Junio de 2019, una mujer se accidentó en una feria al romperse el arnés de seguridad que la mantenía unida a un péndulo gigante. ¿Qué hacer en caso de accidente en la feria? Eloy Ruiz, abogado de indemnización por accidentes, ha informado a La mañana sobre los pasos a seguir.
"Lo primero que tiene que tener en cuenta una persona que necesita el ticket de compra. Lo siguiente es llamar a la policía, para que traten de identificar al responsable. El tercer paso es acudir a urgencias inmediatamente o, como tarde, día siguiente, porque hay que acreditar las lesiones", sintetizó el abogado.
El problema: muchos feriantes no emiten tickets
Todos los aparatos tienen un botón de seguridad que permite a los responsables de la atracción parar la máquina y responder al accidente, pero lo más habitual es que los feriantes no emitan tickets.
Cuando intentamos obtener un ticket en la Feria de Algeciras, las respuestas de los responsables son bastante defensivas. "No se ponga usted en lo peor, mujer, que estamos en la feria", replica un feriante. "¿A ti te dan resguardo por una entrada de cine? Esto es espectáculo también", argumenta otra empresaria.
Los empleados de Feria aseguran que existe una póliza que se hace cargo de cualquier accidente, y que no es necesario el comprobante porque ellos no van a contradecir la palabra de los afectados. "Si ocurre cualquier cosa, Dios no lo quiera, el aparato está asegurado por orden del Ayuntamiento", declararon frente al equipo de investigación.
Y los usuarios de las atracciones, en general, confían en su palabra: "Yo imagino que tendrá alguna responsabilidad civil si ocurre cualquier cosa", declaró el abuelo de un niño que subía a una atracción. Pero el problema de los tickets sigue sin resolverse.
Una víctima pide responsabilidades
Una mujer procedente de Reino Unido, Jennifer Proctor, estaba de vacaciones en Mallorca cuando acudió al Aqualand situo en esa isla. La joven, de 25 años, se tiró por el tobogán de una atracción llamada 'Banzai' y tuvo un accidente del que no recuerda nada.
Las consecuencias fueron graves. Varias fracturas vertebrales la obligaron a someterse a operaciones complejas (como la fusión de dos de sus vértebras, o la inserción de varias varillas y clavos metálicos) y ella dice que le han costado 10 centímetros de altura.
La víctima asegura que los daños le han cambiado la vida, y denuncia a los miembros de la atracción, quienes dice que no le explicaron en ningún momento como debía sentarse o actuar. Ahora, sus abogados han iniciado una investigación para saber realmente qué ocurrió y por qué sufrió el accidente, y exigir las medidas que consideren oportunas.
La Policía trata de prevenir los altercados en la feria
La Unidad de Prevención y Reacción es el cuerpo encargado de vigilar y frenar cualquier acción violenta. Patrullan a pie, registran en busca de drogas o armas blancas e intervienen cuando estallan peleas de cualquier tipo.
Borracheras y lipotimias acaparan, también, la atención de los agentes, encargados de atender a los pacientes mientras llegan a la escena los servicios sanitarios.