El padre del menor retenido en Cuenca: "Me dijeron que le habían lavado la cabeza"
“Cuando me lo entregaron, un agente me dijo que le habían lavado la cabeza y que le habían adoctrinado en una religión evangelista”, cuenta Rafael Marcos en el programa ‘La Mañana’. El padre de Samuel, el niño al que su madre ha mantenido retenido en una vivienda de Cuenca, desconoce cómo ha sido la vida del menor mientras ha permanecido encerrado con su ex pareja. “Me ha dicho que se acostaba tarde y se levantaba a medio día o por la tarde. Me imagino que llevaría una vida nocturna”, añade el progenitor.
Marcos no tiene reparos en hacer declaraciones tras haberse visto envuelto en un suceso que ha copado titulares en la prensa nacional. Ha sido el final de una gran incertidumbre que ha durado dos largos años, el tiempo que ha permanecido sin saber nada de su hijo.
El trabajo de los investigadores llevó a los agentes de la Policía Nacional a una vivienda situada en una pedanía despoblada de la localidad conquense de Tarancón. Se trataba de una finca de unos 6.000 metros cuadrados completamente vallada. Tras varias semanas de vigilancia, se percataron de que un hombre salía en ocasiones del recinto. Tras investigar mejor la zona con la ayuda de un dron pudieron comprobar que allí se encontraba el niño.
María Sevilla, la madre del pequeño, fue detenida el pasado sábado por sustracción de menores. Llevaba en busca y captura desde finales de 2018 tras una sentencia judicial que otorgaba la custodia del menor a su padre. Su hijo de 11 años vivía aislado desde hacía seis meses y estaba sin escolarizar. Tan solo salía de la vivienda algunas noches acompañado por su madre o la actual pareja de esta.
Con el menor también vivía una niña cuya edad no ha trascendido y que Sevilla tuvo con su actual pareja. Cuando los agentes llegaron a la vivienda la pequeña se comportó como si también llevase tiempo aislada y llegó a olisquear a los agentes. La Fiscalía ha iniciado un procedimiento para determinar si existe algún riesgo para ella y poder adoptar medidas cautelares.
María Sevilla acusó en 2011 a su ex marido de haber abusado de su hijo. En 2018 fue ella quien perdió la custodia por haberlo denunciado en falso. La mujer era dirigente de la asociación Infancia Libre por los derechos de los menores. También participó en un acto con parlamentarios de Unidos Podemos para reclamar al Gobierno mejoras en la protección de los menores que han sufrido abusos sexuales.