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Loquillo: "Es como si todo se hubiese confabulado para destrozar Barcelona"

  • El músico barcelonés presenta su nuevo disco, El último clásico
  • Un álbum cargado de rock y resistencia que el artista ha preparado de forma paralela a la gira su cuarenta aniversario

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Las mañanas de RNE con Pepa Fernández - Loquillo: "Es como si todo se hubiese confabulado para destrozar Barcelona"

Después de cuarenta años haciendo lo que mejor sabe Loquillo lo tiene muy claro: "El rock es ya un oficio artesanal y somos los últimos escarceos del siglo veinte, pertenecemos a una cultura que se desvanece", cuenta el músico en esta entrevista en Las Mañanas de RNE con Pepa Fernández.

El barcelonés presenta nuevo disco. El último clásico, la unión perfecta entre su sonido más reconocible y las colaboraciones de otros artistas como Love of Lesbian, Sidonie y Leiva. José María Sanz Beltrán, Loquillo puede considerarse así todo un clásico. "Tienes que tener mucha actitud para perdurar en el tiempo", señala.

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En este último trabajo, Loquillo actúa como correa de transmisión para otros artistas y se proclama altavoz de la resistencia. Aun así, sigue considerando que “aún le queda mucho que aprender”. También es consciente de que “haber roto el esquema” en un país en el que durante años era tabú que un artista de rock siguiese activo a partir de los 40. “Dejaban de existir, acababan siendo cantantes melódicos”, algo que como apunta Loquillo no ocurre en el flamenco y blues. “En estos géneros cuando el artista es mayor es tratado mejor y hacen una obra mejor. Lo que pasa en este país es una anomalía”, concluye.

El músico también ha hablado de su libro Chanel, cocaína y Dom Pérignon, una novela en la que rememora la Barcelona de su pasado. “Soy hijo de la Barcelona los años 60, a la que todo el mundo quería ir, donde las libertades llegaban mucho antes que en al resto del Estado. Yo crecí en esa Barcelona vanguardista y cuando volví en el 85 me encontré con una ciudad mundana, cosmopolita y completamente hedonista", cuenta el músico. "Pero ahora que llevo 15 años sin vivir en mi ciudad, es como si se hubiesen confabulado todos los astros para destrozar Barcelona, de una forma o de otra, y no me meto en tema político, simplemente todo aquello se ha desmoronado", concluye.