El Ebro sufre una plaga de algas a su paso por Logroño
- La ola del calor del verano ha aparecido la aparición de una especie invasora que no aporta ningún beneficio ambiental
- Afectan, sobre todo, a medio centenar de piragüistas que necesitan nadar por el Ebro para entrenar
Las algas plagan las aguas del Ebro a su paso por Logroño. Las olas de calor estival han favorecido la aparición de una especie invasora que, aunque no aporta ningún beneficio ambiental, tampoco lo deteriora. Los principales damnificados, sobre todo, es el medio centenar de piragüistas que entrena en el río sobre todo, en el caso de la población más vulnerable, como las personas con discapacidad y los menores.
Qué es lo que sucede
Estos bancos de algas, aunque terminan desapareciendo en las épocas de frío, salen a la luz cada verano porque la zona es de poco calado. Además, la accesibilidad también se ve afectada porque la rampa de acceso no cumple con las medidas de seguridad necesarias, y el espacio que tienen para llegar al río es muy reducido porque la orilla ha ido ganando terreno. Por eso, exigen también una plataforma flotante que se ajuste al nivel del agua