Dimite la consejera asturiana de Educación tras la multitudinaria manifestación del domingo
- Miles de personas, en el centro de Oviedo, exigieron este domingo mejoras salariales y laborales
- La marcha se ha producido ante el inicio de una huelga indefinida en educación no universitaria el pasado martes
La consejera asturiana de Educación, Lydia Espina, ha anunciado este lunes su "decisión irrevocable" de dimitir tras la multitudinaria manifestación que se celebró este domingo en el centro de Oviedo. Miles de docentes exigieron mejoras salariales y laborales en una protesta que se enmarca en el inicio de una huelga indefinida en todas las etapas educativas no universitarias desde el pasado 27 de mayo.
En una carta remitida al presidente del Principado, Adrián Barbón, Espina ha admitido que "los acontecimientos que se han venido desarrollando en las últimas semanas" le han supuesto "un enorme desgaste emocional y personal que ha llegado a su límite".
“Siento que el ruido y los ataques han traspasado los límites de lo racional y lo político, llegando a lo personal“
"Siento que el ruido y los ataques han traspasado los límites de lo racional y lo político, llegando a lo personal. Y se han impuesto a cualquier posibilidad de diálogo desde el respeto que todos y todas merecemos. Esto es algo que resulta imprescindible para avanzar en pro de ese objetivo común que es mejorar la educación pública", ha manifestado Espina.
ANPE, CC.OO., SUATEA, UGT y CSIF han señalado que la Administración autonómica "miente descaradamente" al afirmar que los docentes asturianos están "muy bien remunerados", que "impone recortes encubiertos" como la "eliminación unilateral" de la jornada reducida en junio y septiembre, y que "pisotea" el derecho a huelga con unos servicios mínimos "abusivos que rozan la ilegalidad".
Asimismo, han afirmado que la consejera Lydia Espina "miente" cuando habla ahora de diálogo, al no haber presentado "ninguna propuesta aceptable", y han sostenido que, junto a su equipo, vive en una "realidad paralela".
La manifestación convocada la víspera por todos los sindicatos docentes, que este lunes inician una huelga indefinida convocada de forma unitaria, congregó en el centro de Oviedo a unas 30.000 personas, según los organizadores y a unas 19.000 según la Delegación del Gobierno.
Mesa de diálogo
En paralelo, la mesa de diálogo entre los sindicatos educativos y el Gobierno del Principado ha concluido este lunes una nueva reunión sin acuerdo. La negociación ha terminado cuando los representantes del Ejecutivo asturiano han pedido más tiempo para estudiar la propuesta de los sindicatos. Estos, por su parte, han calificado el encuentro de “maniobra dilatoria” para “desgastar” a los manifestantes.
En declaraciones a medios han denunciado que el consejero de Hacienda, Justicia y Asuntos Europeos, Guillermo Peláez; y la vicepresidenta del Principado, Gimena Llamedo, han acudido al encuentro sin ninguna propuesta concreta y les hayan emplazado a una nueva reunión el miércoles a las cuatro de la tarde.
Peláez, por su parte, ha afirmado que el Principado ha mantenido la reunión para no perder el tiempo después de la dimisión de la consejera Lydia Espina. Asegura que este ha sido el primer encuentro en el que los sindicatos han hecho una propuesta concreta y que deben estudiarla.
Percepción de deterioro
Espina ha dicho que le preocupa "que este conflicto acabe deteriorando la confianza y la percepción de la sociedad asturiana sobre la educación pública", cuando se trata de "un sistema que está en la actualidad a la cabeza de todas las evaluaciones nacionales e internacionales, no solo en éxito académico sino también por su equidad".
La hasta ahora titular de Educación, que ocupaba el cargo desde julio de 2021, ha admitido que ha cometido "errores, como cualquier ser humano", pero ha precisado que "nunca" ha tomado una decisión "para agraviar ni despreciar a nadie".
Además, ha afirmado que "todas y cada" de sus decisiones "han tenido como objetivo reforzar un sistema educativo que potenciará las capacidades de todo el alumnado, atendiendo también a su bienestar emocional, acompañando a las familias y a los docentes y respondiendo a las necesidades de la sociedad asturiana".
Las reivindicaciones del profesorado
El conflicto en la educación pública asturiana comenzó hace unas semanas tras la decisión de la consejería de suprimir la reducción de jornada en los meses de junio y septiembre ante la extensión del servicio de comedor a dichos periodos, aunque los sindicatos también exigen una batería de medidas para mejorar la educación pública asturiana.
Algunas de estas reivindicaciones son una subida salarial, un aumento de las plantillas, la reducción de la burocracia y la dotación de más personal para atender la diversidad del alumnado.
La de Espina es la segunda dimisión que se produce en el Gobierno de Barbón en los últimos meses, tras la anunciada el pasado 15 de abril por la consejera de Transición Ecológica, Industria y Comercio, Belarmina Díaz, tras el accidente de la mina de Cerredo que el 31 de marzo provocó cinco muertos.