El juzgado declara terminado sin acuerdo el acto de conciliación del rey emérito y Revilla
- Juan Carlos I pedía al expresidente cántabro que rectificara sus palabras y 50.000 euros de indemnización
- El acto de conciliación era el acto previo para evitar que el monarca interpusiera una demanda contra Revilla
La letrada de la Administración de Justicia del Juzgado de Primera Instancia número 13 de Santander ha declarado terminado sin acuerdo el acto de conciliación instado por el rey emérito frente al diputado regional y expresidente de Cantabria Miguel Ángel Revilla, que se celebró el pasado viernes.
En un escrito, al que ha tenido acceso RTVE.es, el juzgado indica que, en el acto, "no llegaron a acuerdo alguno ni fue posible avenir" a las partes, por lo que, tal y como recoge la Ley de Jurisdicción Voluntaria, al no lograr ponerlas de acuerdo, "se debe tener el acto por terminado sin avenencia".
Por tanto, el juzgado acuerda el archivo definitivo de las actuaciones y pide que se notifique su resolución a las partes personadas. Precisamente, la notificación llegó este lunes al abogado de Revilla, según confirman fuentes de su entorno. El juzgado informa también de que contra ésta cabe interponer un recurso de revisión en el plazo de cinco días tras la notificación. En el mismo, el recurrente deberá hacer constar la infracción en que la resolución hubiera incurrido, ha informado el Tribunal Superior de Justicia de Cantabria (TSJC).
La defensa de Juan Carlos I fue la que emprendió las acciones para celebrar este acto de conciliación. Exigía a Revilla que rectificara declaraciones vertidas sobre supuestas actividades ilícitas del monarca y una indemnización de 50.000 euros, que irían destinados a Cáritas.
Revilla: "Yo no he mentido"
El acto de conciliación era el paso previo para evitar una posible demanda del rey emérito contra el expresidente cántabro. Éste se celebró el pasado 15 de mayo en la sala de vistas número 9 del complejo judicial de Las Salesas ante la letrada del Juzgado de Primera Instancia número 13 de Santander, y duró 15 minutos.
A él acudió el propio Revilla, aunque por parte del rey emérito solo asistió su procurador, pese a que Juan Carlos I se encontraba en España. El expresidente cántabro rechazó retractarse de sus declaraciones: "Yo no he mentido".
Y es que, tal y como explicó el letrado del dirigente del PRC, José María Fuster-Fabra, se pedía a su cliente que "reconozca que ha mentido" cuando llamó "evasor fiscal" al exjefe del Estado.
Algo que no se puede hacer, según el abogado de Revilla, que ha aseguró que su patrocinado "no mintió". En este sentido, apuntó que si bien su cliente había vertido "opiniones muy críticas" contra el padre del actual Rey de España, lo ha hecho en base a unos hechos que no conoce por sí mismo, sino por diversas informaciones publicadas en "muchos" medios de comunicación.
La abogada del rey emérito, Guadalupe Sánchez, alegó que las informaciones periodísticas "no son sentencias judiciales" y argumentó que las declaraciones del político cántabro "carecen absolutamente de base fáctica" y que "no todo vale en la contienda política".