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Así se encuentra la equiparación salarial de policías y guardias civiles tras más de 30 años de lucha

  • El Gobierno se compromete a pagar con 247 millones el tercer tramo de la equiparación salarial comprometida en 2018
  • Asociaciones de Guardia Civil y Policía celebran el anuncio pero muestran algunas reticencias

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Manifestación en Madrid de policías y guardias civiles para pedir la equiparación salarial con policiás autonómicas
Manifestación en Madrid de policías y guardias civiles para pedir la equiparación salarial con policiás autonómicas.

El acuerdo del Gobierno para completar la equiparación salarial de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado no ha estado exento de polémica por el momento en que se ha hecho y anunciado. Sin embargo, es una cuestión que llevan demandando policías y guardias civiles desde hace más de tres décadas y que está comprometido desde 2018.

En definitiva, el Gobierno prevé desembolsar 247 millones de euros que se traducirán, según el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, en una subida del 20% en las nóminas de los policías nacionales y guardias civiles para que sus sueldos estén al mismo nivel que el de los policías autonómicos. Aún no hay fecha para el pago, aunque Marlaska ha asegurado que, al igual que con los dos tramos anteriores, se hará de forma retroactiva para todo 2020.

Con ello, el Ejecutivo prevé hacer efectivo el tercer tramo de la subida salarial y que es fruto del acuerdo alcanzado en marzo 2018 entre el Gobierno de Mariano Rajoy, los sindicatos y las asociaciones de Guardia Civil y de la Policía Nacional. Con este último pago, el Gobierno habrá cumplido con el desembolso de 807 millones fijados en el acuerdo.

¿Por qué se anuncia ahora?

En general, las asociaciones de Guardia Civil y Policía han recibido con buenos ojos el acuerdo para el último tramo, aunque piden que el acuerdo de 2018 se cumpla íntegro y no han visto bien que el anuncio se haya hecho en mitad de la polémica por el cese del coronel de la Guardia Civil Diego Pérez de los Cobos.

La mayoritaria Asociación Unificada de Guardias Civiles ha celebrado el acuerdo, pero pide ir más allá "para la implantación de la totalidad de las cláusulas", como la que dispone "la cantidad de 100 millones por cada ejercicio para incentivar el reingreso del personal en Segunda Actividad sin destino y Reserva no ocupada al servicio activo", o la que compromete al Ministerio del Interior a impulsar las medidas legislativas que sean necesarias para garantizar que en el futuro "no se pueda producir una disfunción salarial entre las policías que realicen las mismas funciones".

El Sindicato Unificado de Policía también ha celebrado el acuerdo, mientras que Jupol ha considerado el anuncio de Marlaska como una “cortina de humo” ya que “se olvidan” de la equiparación en cuestiones como la jubilación de los policías o las pagas extra.

Tres décadas de lucha

Los sindicatos de Policía y de Guardia Civil llevan más de 30 años, desde finales de la década de los 80, denunciando la desigualdad en los salarios de agentes de rangos similares entre los que pertenecen al ámbito nacional y los de ámbito regional.

En 1992, el entonces ministerio del Interior del Gobierno de Felipe González, José Luis Corcuera, suscribió con los sindicatos de la época un acuerdo con el que se pretendía equiparar el sueldo de la Policía Nacional con el de los Mossos d'Esquadra y la Ertzaintza, pero no llegó a hacerse efectivo.

Pasaron trece años hasta que en 2005, otro ministro socialista, José Antonio Alonso (del Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero), firmara un acuerdo con los cinco sindicatos de la Policía Nacional de la época para una "progresiva" equiparación salarial con las policías autonómicas y que se aplicaría también a los agentes de la Guardia Civil.

Pero tampoco llegó a hacerse efectivo, pese a que el malestar de los agentes se fue haciendo más patente en los años posteriores, especialmente desde 2008. En 2012, con Rajoy en el poder y todavía bajo los estragos de la crisis económica de 2008, miles de policías y guardias civiles volvieron a manifestarse para denunciar el “maltrato” y “desprecio” de los gobiernos tanto del PSOE como del PP hasta entonces.

En 2017, el Senado aprobó una moción presentada por el PSOE de Policía Nacional y Guardia Civil con los cuerpos policiales autonómicos a fin de que cobraran lo mismo ya en 2020. Y pese a que entonces el PP tildó la propuesta de “trampa” y “electoralista”, los populares votaron a favor.

¿Quién firmó el último acuerdo?

De esta forma, en marzo de 2018, el entonces ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, firmó con los representantes de cuatro sindicatos policiales y siete asociaciones de guardias civiles un acuerdo calificado como “histórico” para que la equiparación de los agentes nacionales con los Mossos d’Esquadra (los que más cobraban) fuera “real, absoluta y total” en 2020.

La equiparación salarial llegó al Congreso a través de una iniciativa legislativa popular (ILP) de Jusapol a finales de 2018 y recibió el visto bueno de todas las fuerzas, salvo las nacionalistas.

Tras una moción de censura en verano de 2018, el Gobierno de Pedro Sánchez efectuó en octubre de ese año y en febrero de 2019 los pagos de los dos primeros tramos.

A principios de 2020 Jusapol presentó una segunda ILP mientras llamaba a múltiples manifestaciones de policías ante el Congreso, a las que se sumaron varios cargos políticos. Sin embargo, la iniciativa recibió el rechazo del Gobierno al justificar que ya se estaba llevando a cabo el desarrollo del acuerdo firmado en 2018. Aun así, Vox decidió entonces presentar a su nombre como proposición de ley la ILP.

Los militares también exigen igualdad salarial

Pero si el pago del último tramo de la equiparación salarial puede cerrar el debate en el seno de la Policía y la Guardia Civil, quienes manifiestan ahora su descontento son los militares.

La Asociación Profesional de Suboficiales de las Fuerzas Armadas (Asfaspro) ha denunciado este miércoles la situación salarial de los militares, que queda aún más en "evidencia" tras el anuncio del Gobierno.

Según sus datos, con la nueva situación, un soldado de las Fuerzas Armadas cobrará 1.000 euros menos que un policía o un guardia civil recién salidos de la academia, un sargento con varios años de servicio 500 euros menos y un teniente (que obligatoriamente debe tener titulación universitaria) 200 euros menos.

Así, Asfaspro lamenta que el Gobierno impulse el tercer tramo de la equiparación salarial de las fuerzas de seguridad mientras los militares "siguen mal pagados, olvidados, ninguneados e ignorados por el Ministerio de Defensa y por el propio Gobierno", que "solo les dedican muchas palabras de agradecimiento".