Un estudio con rayos X revela un retrato inédito de Degas
- Se ocultaba tras Retrato de una mujer, pintado a finales de la década de 1870
- Los investigadores utilizaron un acelerador que genera rayos X de mucha más potencia
Investigadores australianos han desvelado gracias a los rayos X un retrato inédito del pintor impresionista francés Edgar Degas que se ocultaba tras otro de sus cuadros, según ha publicado este jueves la revista Scientific Reports.
Tras el óleo Retrato de una mujer, pintado a finales de la década de 1870, se ocultaba un trabajo previo en el que aparece el rostro de una joven que podría ser Emma Dobigny, modelo en otros cuadros de Degas, según los investigadores.
"Es verdaderamente emocionante haber podido descubrir una nueva obra de arte de Degas que el mundo entero puede contemplar", ha afirmado a la BBC Daryl Howard, coautora del estudio.
Los especialistas conocían desde hace tiempo que Retrato de una mujer estaba pintado sobre otro trabajo, debido a una mancha oscura en el cuadro que ha hecho más evidente a medida que el óleo ha ido envejeciendo.
Los rayos X convencionales habían revelado la sombra de una silueta bajo el cuadro, pero se necesitaba una técnica más avanzada para contemplar la antigua imagen sin dañar la pintura.
Para lograrlo, los investigadores utilizaron el Sincrotrón de Australia, un acelerador que genera rayos X de mucha más potencia, capaces de penetrar con mayor profundidad en las capas de óleo.
Con esa tecnología fueron capaces de detectar los elementos metálicos en los pigmentos que utilizó Degas y reconstruir el retrato original que el artista decidió tapar con un nuevo trabajo.
El retrato antiguo quedó inacabado, tras varios intentos del artista por recomponer partes de la imagen con las que no parecía satisfecho.
Michael Varcoe-Cocks, conservador jefe en la Galería Nacional de Victoria, en Australia, donde está expuesto el cuadro, ha afirmado que "siempre es un momento excitante poder observar algo creado por la mano de un artista que nadie había visto hasta ahora".
"La imagen siempre ha sido parcialmente visible en la segunda pintura, así que el proceso ha sido como desvelar el lado oculto tras una cortina velada", ha señalado Varcoe-Cocks.