Dos agentes de policía mueren en un nuevo ataque yihadista en Francia

• El atacante ha sido abatido en la casa de ambos, donde se había atrincherado
• El hijo de la pareja, al que mantenía como rehén, ha sido hallado sano y salvo
• El asaltante, Larossi Abballa, había cumplido condena por asociación terrorista
• Había jurado fidelidad al Estado Islámico y tenía una lista de futuros objetivos

Dos agentes de policía mueren en un nuevo ataque yihadista en Francia

Dos policías franceses, un hombre y una mujer que eran pareja y padres de un niño, han muerto este lunes en Francia en un nuevo ataque yihadista perpetrado por un ciudadano francés que ya había sido condenado por participar en una red terrorista y que fue finalmente abatido por los cuerpos de élite en la vivienda de los agentes asesinados, donde se había atrincherado.

El atacante, identificado como Larossi Abballa, de 25 años y originario de Mantes-la-Jolie, una localidad de la periferia de París, mató al agente frente a su domicilio en la localidad de Magnaville, otra localidad de los alrededores de la capital, y después retuvo a su compañera y a su hijo dentro del inmueble.

Durante la negociación que mantuvo con la policía y en un vídeo grabado y colgado en redes sociales, reivindicó su pertenencia al Estado Islámico. En dicho aseguró que tenía más objetivos y que quería convertir la Eurocopa, que se celebra en Francia, en "un cementerio".

Asimismo, la agencia Amaq, vinculada al Estado Islámico, ha asegurado en su página web unas horas después de los hechos que el responsable del ataque era un "combatiente" del grupo yihadista, que ha convertido a Francia en uno de sus principales objetivos y que perpetró los atentados de París en noviembre del año pasado en los que murieron 130 personas.

El presidente François Hollande, que ha reunido un gabinete de crisis en el Palacio del Elíseo para estudiar el suceso, ha señalado que se trata de "un acto incontestablemente terrorista", argumentando que el autor "había querido que su acto fuera reconocido como terrorista" y que el Estado Islámico "ha reivindicado también el acto".

Primeras pesquisas de la Fiscalía Antiterrorista

El atentado, en cualquier caso, ha causado una gran conmoción en Francia, puesto que el asaltante ha ido a buscar a sus víctimas a su propia casa: Abballa asestó nueve puñaladas al comandante de policía Jean-Baptiste Salvint, de 42 años, delante de su domicilio, para después atrincherarse en el interior de la vivienda, donde se encontraban su compañera, secretaria administrativa en la comisaría de Mantes-la-Jolie, y el hijo de ambos, de tres años.

Las fuerzas de seguridad se desplazaron hasta el lugar e intentaron negociar con el secuestrador, pero las conversaciones fracasaron, por lo que decidieron asaltar la casa.

En la operación, los agentes abatieron al atacante y, en el interior del inmueble, hallaron el cuerpo sin vida de la mujer, mientras que el menor estaba asustado pero indemne, tal como ha explicado el portavoz del Ministerio del Interior, Pierre-Henry Brandet, desde el lugar de los hechos.

Las primeras pesquisas efectuadas por la Fiscalía Antiterrorista, que ha abierto una investigación del atentado, han revelado que Larossi Abballa aseguró haber jurado lealtad al jefe del Estado Islámico, Abu Bakr al Bagdadi, hace tres semanas, según ha informado este martes el fiscal de París, François Molins.

Una lista de objetivos con diversas personalidades

Abballa explicó que con su acto respondía al llamamiento de Al Bagdadi de "matar a los infieles en sus casas con sus familias", según Molins, que ha remarcado que el yihadista sabía que sus víctimas eran policías.

El fiscal ha detallado, además, que la policía francesa ha detenido a tres personas de 27, 29 y 44 años relacionadas con el presunto yihadista y que las fuerzas de seguridad encontraron en el domicilio de la pareja asesinada una lista de objetivos entre los que había personalidades públicas, periodistas, policías y raperos.

Abballa estaba fichado por la policía francesa, puesto que en 2013 fue juzgado junto a otras siete personas y condenado a tres años de prisión por "asociación de malhechores con fines terroristas", al formar parte de una red que se dedicaba a enviar yihadistas a Pakistán.

Tras salir de prisión en septiembre de ese mismo año, Abballa abrió en 2015 un restaurante de comida rápida en Mantes-la-Jolie. Según la emisora France Info, estos últimos meses había sido vigilado por los servicios secretos, que lo relacionaban con otra red yihadista conectada con Siria.

El presidente francés, François Hollande, se ha reunido con el primer ministro, Manuel Valls (segundo por la derecha), el ministro de Justicia, Jean-Jacques Urvoas (izquierda), y el titular de Interior, Bernard Cazeneuve (derecha) tras el ataque contra dos policías. REUTERS

Hollande reclama una mayor colaboración internacional

Hollande ha convocado en el Palacio del Elíseo un gabinete de crisis en el que han participado el primer ministro, Manuel Valls, el ministro de Justicia, Jean-Jacques Urvoas, y el titular de Interior, Bernard Cazeneuve, para analizar el caso. Tras el encuentro, el presidente francés ha reconocido que Francia se enfrenta a "una amenaza terrorista de gran importancia" y ha instado a impulsar la colaboración internacional para combatir los actos terroristas: "La lucha contra el terrorismo necesita una acción internacional resuelta, un intercambio de información, un seguimiento de los individuos".

“La movilización del Gobierno es total desde hace meses para una amenaza que hemos dicho que es elevada en Francia, en Europa, en Occidente“

En cualquier caso, el suceso reaviva las dudas sobre la capacidad de las autoridades francesas para garantizar la seguridad, dado que el presunto terrorista estaba fichado. En este sentido, el ministro de Interior ha señalado que "la movilización del Gobierno es total desde hace meses para una amenaza que hemos dicho que es elevada en Francia, en Europa, en Occidente, como lo han probado los hechos ocurridos en Estados Unidos hace 48 horas", en referencia al atentado cometido en Orlando contra una discoteca gay en el que murieron 49 personas.

Cazeneuve ha recalcado que desde comienzos de año "más de 100 individuos" han sido detenidos como sospechosos de terrorismo, lo que a su juicio prueba "una actividad extremadamente intensa" de las fuerzas antiterroristas y de los servicios secretos.

El titular de Interior ha querido destacar la intervención de las fuerzas de la policía, "que han demostrado tener mucha sangre fría y un gran profesionalismo y que han salvado la vida del pequeño". Además, ha visitado a lo largo de la mañana del martes las comisarías de Le Mureaux y de Mantes-la-Jolie, donde trabajaban los dos funcionarios públicos asesinados, y donde sus compañeros "están traumatizados", según el ministro.