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Arias propone que Zelaya sea presidente de Honduras hasta enero

  • El Premio Nobel de la Paz espera que se resuelva la situación por la vía diplomática
  • Arias ha propuesto un Gobierno de conciliación nacional presidido por Zelaya
  • Exige la renuncia a una consulta inconstitucional y aboga por el adelanto electoral

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Honduras espera la vuelta de Zelaya

El presidente de Costa Rica, Oscar Arias, mediador en el conflicto de Honduras, ha presentado a las partes una propuesta de siete puntos para solventar la crisis, que incluye la restitución de Manuel Zelaya como presidente hasta enero.

   

Arias planteó esta iniciativa en la segunda ronda del diálogo, iniciada hoy en San José, con los representantes del depuesto presidente Manuel Zelaya, y del gobernante de facto, Roberto Micheletti, desde el golpe de Estado del pasado 28 de junio.

Otras de las propuestas del mandatario y Premio Nobel de la Paz 1987 son "la conformación de un gobierno de unidad y reconciliación nacional compuesto por representantes de los principales partidos políticos".

   

El tercer punto de la propuesta presentada a las comisiones enviadas a San José, tanto por Zelaya como por Roberto Micheletti, presidente de facto , es aplicar una "amnistía general para todos los delitos políticos, exclusivamente".

Renuncia a la consulta inconstitucional

   

La "renuncia expresa" del mandatario depuesto, Manuel Zelaya, a instalar una cuarta urna en las elecciones del próximo noviembre, así como a cualquier consulta popular no autorizada por la Constitución, es otro de los puntos.

  

Arias también propuso anticipar las elecciones hondureñas del 29 de noviembre al último domingo de octubre y adelantar la campaña electoral un mes.

   

El traslado del comando de las Fuerzas Armadas hondureñas del Poder Ejecutivo al Tribunal Supremo Electoral un mes antes de las elecciones "para garantizar la transparencia y la normalidad" de los comicios, es el sexto punto expuesto por el mediador.

   

La última idea lanzada es la confirmación de "una comisión de verificación compuesta por hondureños notables y miembros de organismos internacionales, en especial de la Organización de Estados Americanos (OEA) que vigile el cumplimiento de estos acuerdos y supervise el correcto retorno al orden constitucional".

   

El mandatario expresó a las delegaciones hondureñas que si estos puntos son aprobados por las partes y se cumplen en el corto plazo, Costa Rica "se compromete a emplear todas las vías diplomáticas para gestionar el retorno inmediato de Honduras a la OEA y el levantamiento de las sanciones impuestas por otros gobiernos y organismos".

   

Arias destacó que esta es una oportunidad histórica para Honduras de convertirse en el primer país del mundo en revertir un golpe de Estado por "voluntad de las partes".

   

En las próximas horas se espera que las delegaciones enviadas a San José tanto por Zelaya como por Micheletti, discutan sobre esta base planteada por el mediador en busca de un acuerdo que ponga fin a la crisis política de ese país.

Tenso ambiente

   

El proceso de mediación auspiciado por Arias se inició el pasado 9 de julio, pero ha sido blanco de críticas por parte de líderes de izquierda latinoamericanos como el presidente de Venezuela, Hugo Chávez, y el mandatario de Nicaragua, Daniel Ortega.

   

Ortega calificó este proceso como una "aberración" porque "junta a los golpistas con los constitucionalistas que fueron depuestos".

   

Chávez ha asegurado que este diálogo "nació muerto" y que es una "trampa" para Zelaya, al mismo tiempo que advirtió de que en Honduras se podría desatar un conflicto civil.

   

La mediación de Arias cuenta con el apoyo de la Organización de Estados Americanos (OEA), la ONU y el Gobierno de Estados Unidos.

   

"Cerramos las puertas para buscar acuerdos, esperamos abrirlas para anunciarlos", concluyó el presidente costarricense antes de iniciar las conversaciones del día.