Enlaces accesibilidad
arriba Ir arriba

Los presidentes de Rusia y Ucrania hablan esta noche cara a cara sobre el conflicto que enfrenta a los dos países. Es una oportunidad de acercamiento entre Putin y Poroshenko tras las reuniones de la tarde en la capital de Bielorrusia, en las que también ha participado la Unión Europea.

Tras protagonizar un largo periodo de consenso y buenas relaciones con Europa y Estados Unidos, en los últimos meses la situación ha cambiado. Putin se enfrenta hoy a Occidente y levanta todo tipo de suspicacias. 

Rusia hará una lista de los productos agroalimentarios afectados. En conjunto, representan casi el 14% de las importaciones rusas y supusieron, de enero a mayo, unos 13.000 millones de euros. Alemania y Polonia son los países de la Unión Europea que más llenan la despensa rusa. Moscú compra manzanas, plátanos, tomates, patatas, carne y pescado a los 28, pero también importa aves de Estados Unidos. Responde así a las sanciones que desde marzo castigan económciamente a bancos públicos, dirigentes y los sectores de defensa y energía.

Yukos surgió tras la caída de la Unión Soviética y llegó a ser la empresa privada más importante de Rusia. Un gigante del petróleo propiedad de Mijaíl Jodorkovski, en su día el hombre más rico de Rusia y amigo de Vladímir Putin hasta que se convirtió en su contrincante político y terminó cayendo en desgracia. Pasó diez años en prisión condenado por evasión de impuestos. Igual que cayó Jodorkovski, en 2006 quebró su imperio. El gobierno ruso tomó una serie de decisiones para desmantelar Yukos que finalmente fue nacionalizada.

El presidente de Rusia, Vladímir Putin, ha prometido que Moscú hará todo lo que esté en su mano para que el conflicto armado en el este de Ucrania se resuelva mediante la vía pacífica. "Rusia, por su parte, hará todo lo que de ella dependa para que el conflicto en Ucrania pase de su actual fase militar a una fase de debate en una mesa de negociaciones con medios pacíficos y diplomáticos", ha afirmado el jefe del Kremlin.

Un acuerdo entre Kiev y los separatistas prorrusos está permitiendo recuperar los cuerpos de los fallecidos del avión de Malasia Airlines. Tres días después del derribo de la aeronave continúan las labores para poder repatriar los 298 cuerpos , cuestión fundamental para el Gobierno holandés. Las acusaciones sobre la responsabilidad de quién derribó el aparato se siguen cruzando (21/07/14).

Sobrevolaba, a diez mil metros de altura,  la zona en la que se enfrentan el ejército ucraniano y las milicias prorrusas cuando desapareció de los radares. Estados Unidos asegura que recibió el impacto de un misil tierra aire y hasta el momento, nadie ha desmentido esta hipótesis. En los últimos días al menos dos aviones militares han sido derribados en la misma zona.