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La ciudad de Donetsk, en el Donbás ucraniano ocupado por Rusia, lleva más de una década bajo control directo o indirecto de Moscú, y sus residentes están cansados de todos estos como frente de guerra. El Kremlin ha dejado claro que no piensa renunciar a este territorio ni al resto del Donbás, que consideran parte de la Federación Rusa, ante un eventual acuerdo de paz.

Después de tres años de guerra, los residentes que quedan en la zona se definen mayormente como prorrusos, o al menos no se manifiestan de forma abierta como ucranianos identitariamente. Pero sí desean, como el resto de ucranianos, que las conversaciones de paz que han abierto Donald Trump y Putin puedan conducir al fin de la guerra.

Tres años después de la invasión, las fuerzas rusas han redoblado sus ataques en los últimos días. Ocupan una quinta parte del territorio de Ucrania: casi todo el Donbás, parte de Zaporiyia y parte de Jersón. La guerra ha dejado una enorme destrucción con aldeas y ciudades completamente arrasadas. Así lo está pudiendo comprobar nuestro enviado especial, Fran Sevilla.

La guerra en Ucrania cumple este lunes tres años. El ex alto representante de la UE para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Josep Borrell, asegura que la Unión Europea y, sobre todo, Ucrania tiene que formar parte de las negociaciones para la paz. "Europa debe definir cuál es su capacidad de acción, aquí no valen ya las palabras, el problema es qué puede hacer la UE para sustituir a la ayuda americana". Borrell considera que "es el colmo de la deshonestidad" decir que Ucrania empezó la guerra o que Zelenski es un dictador e insiste en que hay que desmontar y contrarrestar estas palabras de Trump.

El exjefe de la diplomacia europea no cree que los resultados de las elecciones en Alemania cambien el compromiso con Ucrania. "Es el país que más ha ayudado a Ucrania dentro de la UE y lo seguirán haciendo". Sobre los votos a la extrema derecha, Borell explica que provienen del descontento de una parte de la población. "Es un voto de protesta frente a las desigualdades. Se les plantea la migración como un problema de competencia económica y de seguridad. La extrema derecha vive de eso".

Tres años después del inicio de la guerra, hablamos con nuestros enviados especiales a Ucrania, Aurora Moreno y Fran Sevilla, para saber cómo están el país y sus habitantes; analizamos cuál es la situación en el campo de batalla con Angelica Evans, investigadora del Instituto para el Estudio de la Guerra; preguntamos a cuatro ucranianos, Semen, Tatiana, Oleksandr y Tim qué opinan de los particulares planes de paz de Donald Trump para Ucrania y tratamos de explicar cómo se construye la paz con la ayuda de Mabel González Bustelo, experta en procesos de mediación internacional en conflictos armados y políticos. Este es el primero de los tres especiales que hemos preparado con motivo del tercer aniversario de la guerra de Ucrania.

En estos tres años de invasión, Rusia se ha anexionado varias regiones del este y el sur de Ucrania. Y se suman a Crimea, hace una década. Todo indica que los territorios ocupados serán un elemento clave en las negociaciones de paz. Un equipo de RTVE ha estado en la ciudad de Mariúpol; todo un símbolo de la destrucción que ahora Moscú intenta reconstruir.

FOTO: LARA PRIETO

El presidente ucraniano Volodímir Zelenski no confirma que el acuerdo para que Estados Unidos se haga con los minerales raros de Ucrania esté tan cerca. El presidente ucraniano dice que hay un borrador en el que ya están trabajando representantes de Washington y Kiev, pero no va más allá.

A cambio del acceso exclusivo a esas riquezas que Donald Trump valora en medio billón de dólares, Estados Unidos daría a Ucrania "garantías de seguridad". Todavía no se sabe en qué consistirían. Pero si no lo hace, si no firma, Washington podría cortar el flujo de armas y dinero con el que sobrevive Ucrania.

En lo que Estados Unidos y Ucrania tampoco coinciden es en cómo acabar la guerra. Washington va a llevar a la ONU una propuesta de resolución propia, no pactada con Kiev por primera vez en tres años de invasión rusa, en la que pide que acaben los combates sin reclamar que Ucrania recupere sus territorios.

Para el entorno de Zelenski esto es inaceptable, y creen que socava la posición de Estados Unidos como primera potencia global.

Las fuerzas rusas intensifican sus ataques en los distintos frentes en Ucrania, especialmente en el Donbás. Nuestro enviado especial Fran Sevilla se encuentra en Konstantinivka, localidad estratégica porque da acceso a la capital administra de la provincia de Donetsk, a Kramatorsk. El gobernador provincial ha pedido a la población que evacúe la zona, en la que rige un toque de queda severo. En el otro frente, en Pokrovsk, el ejército ruso sigue avanzando y ya han ocupado dos nuevas localidades.