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En Las mañanas de RNEJosé Luis Ábalos, portavoz provisional del grupo parlamentario socialista en el Congreso, ve "normal" que no haya barones en la nueva ejecutiva del partido. "No es habitual que hubiera tantos secretarios territoriales en la dirección política". Aunque su estreno como portavoz tendrá lugar el 29 de mayo en el pleno de los presupuestos, explica que hace ya dos días que mantiene contactos con el dimitido Antonio Hernando para coordinar los trabajos del grupo.

Considera que el proceso está cerrado y ve voluntad de "pasar página". Sobre la decisión de García-Page de posponer su futuro hasta después del congreso de junio, Ábalos señala que se trata de una decisión personal, aunque apunta que "cuando uno participa libremente en un proceso tiene que asumir el resultado".

Pedro Sánchez ha designado al diputado valenciano José Luis Ábalos portavoz interino del grupo parlamentario socialista para sustituir a Antonio Hernando, que dimitió tras conocerse el resultado de las primarias. Sánchez no va a incluir a ningún barón en su Ejecutiva. Quiere que la nueva dirección socialista sea además paritaria, intergeneracional e integradora.

La coordinadora de la campaña de Pedro Sánchez, Adriana Lastra, ha instado a todas las federaciones, en especial a Andalucía y Aragón, a pactar las listas de los delegados socialistas que irán al próximo 39º Congreso Federal bajo la fórmula de la proporcionalidad en función del resultado de las primarias que plantea el nuevo secretario general electo.

Así lo ha dicho en 'Los Desayunos de TVE', donde se ha mostrado "sorprendida" por que esas dos federaciones- en Andalucía ganó las primarias Susana Díaz y en Aragón, que apoyaba a Díaz, finalmente ganó Sánchez- muestren reticencias a alcanzar esas listas de unidad para la formación de los delegados que se decidirán en los denominados "congresillos" regionales que se celebran hasta este domingo.

Manuel Escudero, coordinador del programa económico de Pedro Sánchez, comenta en Las mañanas de RNE que tanto el programa político como el económico que el secretario general del PSOE ha presentado debe ahora ser consensuado en el congreso de junio. No obstante, aboga por reclamar un plan de choque contra la pobreza, reducir los tiempos de trabajo y subir el salario medio profesional, medidas que, tal como subraya, no se pueden implementar de un día para otro y requieren el concurso de los agentes sociales.

  • El PSOE andaluz va a "arrimar el hombro" para que al partido le "vaya bien"
  • Para ella, ahora "toca" centrarse en Andalucía y "cuanto antes"
  • Las federaciones de Andalucía y Aragón, reacias a pactar los delegados
  • Felipe González admite volver a estar en "minoría" pero pide apoyar a Sánchez

El primer secretario del PSC, Miquel Iceta, está convencido de que Pedro Sánchez encontrará una buena disposición por parte de todo el mundo. "Tenemos que levantar un proyecto político que pasaba por un momento muy complicado", dice. En Las mañanas de RNE señala que es al secretario general a quien le corresponde marcar los ritmos y las maneras y sitúa la integración en el congreso que el PSOE celebrará en poco más de tres semanas. También pide ser capaces de aceptar la voluntad mayoritaria de los militantes.

En relación a la detención de Sandro Rosell por presunto delito de blanqueo de capitales, Iceta afirma que se trata de un delito de los que más rabia le dan. En cuanto a la conferencia de Puigdemont en Madrid, asegura que "estamos en monólogos sucesivos y ante un despropósito".

"Ahora lo que hay que hacer es apoyar a Pedro, estar a su lado, arrimar el hombro, y es lo que vamos a hacer los socialistas andaluces, ayudarlo para que cuanto antes seamos la alternativa de Gobierno que este país necesita", ha dicho la presidenta de Andalucía, Susana Diaz, tras ser arrollada por Pedro Sánchez en las elecciones primarias del PSOE.

Su victoria en las primarias, por más del cincuenta por ciento de los votos de los militantes, supone el regreso a la secretaría general, ocho meses después de su dimisión. Su mensaje es de unidad. Se abre ahora una nueva etapa en la que, sin duda, habrá cambios. Pedro Sánchez se dispone, en primer lugar, a recomponer las relaciones con los barones que no le apoyaron. Y a cambiar el rumbo de la oposición socialista.