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Un plan estratégico de políticas activas para generar empleo, reducir el 50% de los altos cargos de la Junta, un techo de gasto público o reducir de 11 a 7 el número de Consejerías son algunas de las propuestas que ha hecho José Antonio Monago, candidato a la presidencia de Extremadura por el PP, en el debate de investidura. Monago ha recogido en su programa muchas de las reivindicaciones de la izquierda para asegurarse la abstención de IU, imprescindible para acceder al cargo. Tras escuchar el discurso del PP, Izquierda Unida mantiene que se abstendrá en la votación de investidura del jueves. Para el PSOE la propuesta de Monago es derechas y le acusan de tener un programa oculto.

El futuro presidente de Extremadura, José Antonio Monago (PP), ha abogado por "recuperar el diálogo, el consenso y la unidad de partidos" en Extremadura y ha anunciado una reducción de las consejerías, que pasarán de 11 a siete, y la supresión del 50% de los altos cargos públicos y de entre el 50 y el 70% en los gastos de la Administración regional. Así lo ha dicho en la exposición de su programa de gobierno en la primera jornada de investidura en la Junta de Extremadura. El jueves, Monago será investido presidente de Extremadura con los votos a favor de su grupo y la abstención de IU, que permitirá un cambio de Gobierno en esta comunidad tras más de 30 años de gobierno socialista.

María Dolores de Cospedal, secretaria general del PP y presidenta de Castilla-La Mancha, ha afirmado que "es una buena noticia". "Es un descenso que tiene que congratularnos a todos porque siempre es bueno que haya personas en nuestro país que hayan encontrado un empleo", ha declarado Cospedal en una rueda de prensa en la sede del PP. Sin embargo, la secretaria general del PP ha resaltado que ese descenso del desempleo se debe a "una situación estacional" relacionada con la "campaña de verano" que ha comenzado y que, por lo tanto, "serán empleos que no se prolongarán demasiado en el tiempo, más allá de la campaña veraniega". Por su parte, Cayo Lara, coordinador federal de IU, ha pedido al vicepresidente primero del Gobierno, Alfredo Pérez Rubalcaba, que anule la reforma laboral porque se ha demostrado que "ha sido un fracaso absoluto" y el "despido es más barato" y que aplique las propuestas de IU pero sin apropiarse de su autoría. Lara se ha mostrado satisfecho porque se haya reducido el número de parados, aunque la inmensa mayoría de los contratos sean temporales.

El único candidato es José Antonio Monago, del Partido Popular, que consiguio en las elecciones dos escaños más que el PSOE. Los tres diputados de Izquierda Unida insisten en que se abstendrán, lo que permitiría la llegada de Monago al Gobierno extremeño. Desde la dirección nacional de la coalición insisten en que es un error, aunque todavía no quieren hablar de posibles sanciones.

Sus ayuntamientos no pudieron constituirse hace dos semanas porque se recurrió el recuento electoral. En Barcelona i Girona, Convergència i Unio ha roto con 32 años de hegemonía socialista, y en Santiago también hay traspaso, pero al Partido Popular.