Una investigación de Méxicanos contra la Corrupción y la Impunidad ha encontrad que que en la Ciudad de México, hasta el 12 de mayo, había, al menos, 4.500 actas en las que la Covid-19 aparece como causa confirmada o probable de muerte. Es el triple que las cifras oficiales.
Más de 130 personas han muerto en México por consumir alcohol adulterado. La elaboración de licores caseros es habitual en todo el país, pero su demanda ha crecido en medio de la emergencia sanitaria. Sobre todo, allí donde las autoridades han impuesto La ley Seca
El país roza los 30.000 infectados y las 3.000 muertes de pacientes infectados con la Covid-19, sobre todo por la rápida expansión de la enfermedad en Ciudad de México, la capital.
En Latinoamérica hay mas de 280mil casos confirmados y más de 15mil fallecidos. El país más afectado es Brasil, seguido de Perú, Ecuador y México. Algunos se preparan ya para enfrentar el pico de la pandemia con el reto de confinar a una población muy vulnerable económica y socialmente.
"Ya no hay cerveza, porque pararon la producción". En México, el Gobierno no considera esencial la producción de cervezas, de chelas, como las llaman aquí, y, después de un mes parada, se empiezan a confirmar los peores temores de algunos... Coronavirus: última hora
Las 'maquiladoras' son fábricas de propiedad extranjera, sobre todo, estadounidense, que se han instalado en México por los bajos impuestos y salarios. Hay cientos de ellas a lo largo de toda la frontera y muchas de siguen abiertas pese a la pandemia. Sus trabajadores denuncian presiones para que se mantengan abiertas a pesar de los contagios y las condiciones de hacinamiento en las que trabajan. Coronavirus: última hora en directo
En México, la cuarentena no es obligatoria y los criminales han optado por no quedarse en casa. Con 99 asesinatos diarios, marzo fue el segundo mes más violento en décadas, abril pinta aún peor, ya que el lunes hubo 114 homicidios. La lucha entre cárteles se habría recrudecido en un contexto de fronteras cerradas y calles vacías que dañan tanto al mercado internacional como al local.
El gobierno mexicano no espera más restricciones que las que ya existen. Con la pandemia, Washington ha cerrado la frontera salvo para cruces esenciales, ha suspendido las solicitudes de asilo y deporta de manera exprés a todo el que intenta entrar irregularmente.
Trabajar en la sanidad durante esta pandemia del coronavirus se ha convertido en una profesión de riesgo, no solo por el cuidado de enfermos y la batalla al virus, sino por el rechazo social que muchos profesionales sufren. En México, la policía protege los accesos y salidas de hospitales. A Luis Gerardo, un enfermero de Reynosa, le rociaron con cloro en una tienda cuando iba camino del hospital. En las últimas semanas, las redes sociales se han llenado de denuncias parecidas: la enfermera a la que tiraron café ardiendo desde un coche, a la que partieron dos dedos en un forcejeo o los que pegaron a los médicos que les impidieron ver a un familiar muerto con COVID-19. [Coronavirus: última hora en directo
Los ciudadanos mexicanos que huyen del país estos días se han encontrado con todas las fronteras cerradas. Además, no están siendo acogidos en los refugios que se les tiene habilitado por miedo al contagio de coronavirus COVID-19, lugares que se han convertido en posibles focos debido al gran número de personas y la falta de medidas de higiene. Estados Unidos ha suspendido cualquier trámite de solicitudes de asilo y devuelve a los que intentan cruzar la frontera.
La diabetes y la obesidad son las otras epidemias de México además del coronavirus. La primera afecta al 14% de su población, la segunda al 75%, ya que tres de cada cuatro de los 127 millones de mexicanos tienen sobrepeso. La pandemia aterriza sobre estas emergencias epidemiológicas previas. Las personas con diabetes con mucho más propensas a desarrollar COVID-19. El problema es tan grave que neutraliza la ventaja de tener una población más joven que la europea o la estadounidense.
Desde el martes 31 de marzo se han suspendido supuestamente todas las actividades no esenciales, pero algunos comerciantes se niegan a cerrar bajo el miedo que supone la falta de ingresos económicos que agrava la situación provocada por el coronavierus.
Las cárceles de Chihuahua o de Santa Marta en la Ciudad de México han transformado sus talleres en fábricas de material de protección ante el Coronavirus. Las internas empezaron elaborando mascarillas para la prisión y ahora suministran también al exterior.