La primera ministra de Reino Unido, Liz Truss, ha dimitido tras solo 44 días en el cargo. Después de duros días de crisis interna en un partido que parece haberle dado la espalda, y de anular prácticamente todo su proyecto financiero y político tras la agitación de los mercados financieros.
Ahora vuelve a abrirse la carrera por elegir un sucesor, la misma por la que Truss fue elegida hace un mes y medio. En ella, solo los tories pueden votar quien será su líder y a la vez primer ministro. A pesar de las disputas internas, los diputados tories deberán alcanzar un acuerdo para evitar perder el poder en unas elecciones generales, en las que los laboristas cuentan con ventaja en las encuestas.
En Rusia ven con preocupación los últimos decretos del Kremlin. Además de decretar la ley marcial en los territorios anexionados en Ucrania (Zaporiyia, Jersón, Donetsk y Lugansk), Vladímir Putin ha puesto en alerta Crimea y seis regiones rusas limítrofes con el país vecino. Los rusos temen que, junto con el decreto de movilización, estas normas controlen sus movimientos o sirvan para enviar a más hombres al frente. La guerra llega, cada vez más, a los hogares rusos.
En Jersón, Rusia sigue evacuando a miles de personas para ponerlas a salvo, aseguran, de los combates en Jersón. El gobierno de Kiev lo considera una deportación masiva encubierta.
Con la ley marcial, las autoridades prorrusas de las regiones anexionadas planean trasladar a entre 50.000 y 60.000 ucranianos en seis días. Han empezado con policías, funcionarios y trabajadores de bancos. El temor de los jóvenes, que suponga en la práctica una reclutación forzosa y terminen combatiendo contra sus propios compatriotas. La ley también puede restringir sus movimientos.
Foto: EFE/EPA/Administración de la ciudad de Jersón
Liz Truss llegó al cargo de primera ministra hace 44 días, cerrando la era de Isabel II, que murió poco después, y anunciando una bajada radical de impuestos valorada en más de 60.000 millones de euros, además de una serie de audaces medidas para contener la inflación. Nada de eso ha llegado a ponerse en práctica en ningún momento.
Liz Truss tuvo que dar marcha atrás y, desde entonces, no ha conseguido enderezar su credibilidad al frente del país. Pese a que el miércoles aseguraba que ella era una "luchadora" y "no una desertora", ha acabado presentando su dimisión.
Liz Truss ha anunciado su dimisión como líder del Partido Conservador, lo que implica su dimisión también como primera ministra, ante la revuelta en su propio partido, solo un mes después de llegar al cargo.
"Fui elegida por el Partido Conservador para realizar cambios", ha dicho Truss en su breve comparecencia ante el número 10 de Downing Street, residencia de los primeros ministros. "Reconozco estos problemas no puedo llevar a cabo mi mandato (...) Dimito como líder del partido". Truss ha anunciado que ahora "habrá una elección de liderazgo" en el partido, y en el plazo de una semana, para elegir a su sustituto al frente del Gobierno, y ella permanecerá en el cargo hasta que se elija.
Las grabaciones en las que se alinea del lado de Putin y culpa de la guerra a Zelensky han puesto en una difícil situación a Giorgia Meloni, líder del partido de ultraderecha
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha anunciado en Bruselas un acuerdo con Portugal y Francia para construir un corredor verde entre Barcelona y Marsella que sustituye al proyecto del MidCat. Esta nueva infraestructura energética permitiría transportar gas natural ahora y en un futuro hidrógeno verde, además de mejorar las interconexiones energéticas de la Península Ibérica con el resto de Europa.
Serbia es un aliado tradicional de Rusia. Desde el inicio de la guerra, el gobierno de Belgrado no ha condenado de forma explicita la invasión rusa, tampoco ha aplicado sanciones contra las autoridades rusas. Al contrario, firmó varios acuerdos de cooperación con Moscú, en los ámbitos energético y diplomático. Una situación criticada en Bruselas, que pide de forma cada vez más clara a Serbia romper con Rusia si quiere seguir aspirando a entrar en la Unión Europea. Es un reportaje de Guillaume Bontoux.
Rusia sigue bombardeando infraestructuras civiles. ¿Pueden estos ataques ser considerados crímenes de guerra? ¿Esto va a tener consecuencias en la Justicia? En Las Mañanas de RNE resolvemos estas dudas de la mano de Luis Moreno Ocampo, que fue el primer fiscal de la Corte Penal Internacional y autor del libro ‘Cuando el poder perdió el juicio’. Ha señalado que el principal crimen es iniciar una guerra y que una vez que se hace, desencadena producir crímenes de guerra y crímenes inhumanos. Moreno Ocampo insiste en que Ucrania nos da la oportunidad de evolucionar y buscar soluciones específicas para parar una guerra, pero que todavía “no estamos en ese punto.” Sobre juzgar estos ataques, el ex primer fiscal de la CPI, ha aclarado que Putin no tiene inmunidad frente a la CPI y que por tanto, podría ser procesado y ahí “el juego cambiaría.” El problema está en que “si se procesa, luego hay que articularlo con esfuerzos diplomáticos para que eso tenga impacto y esto normalmente no ocurre.”