El problema con el suministro de gas tiene su origen en la invasión rusa de Ucrania. Este martes, el presidente ucraniano ha insistido en que Rusia usa la energía como arma de guerra y reclama a la Unión Europea que responda con más contundencia. Zelenskidefine el corte de gas como un acto de terror y un "chantaje" y pide un octavo paquete de medidas que aleje aún más a los Veintisiete de Rusia. Moscú, por su parte, insiste en que no tiene ningún interés en reducir el suministro a una Europa a la que acusa de hacerse daño a sí misma con las sanciones.
FOTO: Ukrainian Presidential Press Service/Handout via REUTERS
Bruselas estudia suavizar la exigencia de recortar el consumo de gas tras la presión de los países del sur, un día después de que Gazprom haya anunciado la reducción, de nuevo, del envío de gas a Alemania. En Las mañanas de RNE tomamos el pulso a este debate hablando con Alberto Carbajo Josa, ex director general de operación de Red Eléctrica España.
Afirma que las peticiones de los países son entendibles porque tienen especificidades diferentes y se encuentran en situaciones distintas. Pero ve recomendable que se modere el consumo de gas, aunque señala que es más fácil hacerlo a nivel doméstico que en las industrias, a pesar de que estas consumen la mitad de esta energía que llega a nuestro país. "Hay que cuidarlo porque eso sí nos acercaría más a una recesión económica", dice.
Sobre la gasística rusa, no le quita importancia a los mantenimientos preventivos pero comenta que el Kremlin ha encontrado "los pies de barro" de la UE y utiliza el gas para tratar de alcanzar alguna negociación, ya sea sobre la guerra en Ucrania o sobre las sanciones que hay impuestas sobre el país.
Gazprom ha anunciado hoy que va a cerrar aún más la mano con Alemania. Va a detener por mantenimiento otra turbina en el gasoducto Nord Stream 1 a partir del miércoles, reduciendo a la mitad sus envíos y funcionando al 20% de su capacidad. En el informativos 24 horas hablamos con Javier Blas, periodista del Bloomberg especializado en materias primas.
Afirma con rotundidad que el país europeo no tendrá gas suficiente para pasar el invierno y que debe aplicar la etapa 3 de su plan de emergencias, que requiere pedir a las grandes empresas y manufactureras alemanas que reduzcan el consumo de gas en verano para ahorrar. Señala que esto será posible pero que tendrá un coste económico muy importante, llegando a reducir su actividad económica y entrar en recesión. También deberán actuar el resto de países para ayudar de alguna manera a Alemania. "Todos los países se van a ver abocados a cierta reducción del consumo", dice Blas, que añade que esto se producirá también debido a la subida del precio. Aunque critica que Berlín no ha hecho reformas estructurales para que el efecto no sea tan grave. Sobre España, señala que lo tendrá más sencillo al tener la opción de importar gas natural licuado.
"Rusia está utilizando cualquier tipo de excusa, y si no las tiene, se las inventa, para reducir el flujo de gas a la Unión Europea", comenta el periodista, "lo que realmente está haciendo es tratar de estrangular la economía europea para forzar a sus líderes a que detengan la ayuda que se le está proporcionando a Ucrania. Es un arma económica para poner a la economía europea de rodillas", concluye.
En el caso de Argelia, que notificó una avería en el gasoducto que nos une a ese país, afirma que no es la misma situación que la alemana con Rusia pero avisa de que esto puede volver a pasar y poner en jaque el suministro en España.
En Ucrania, las tropas de Zelenski avanzan hacia el este y el sur con el objetivo de intentar recuperar Jersón. Tras cinco meses de guerra, a muchos desplazados se les acaba el dinero y se ven obligados a volver a sus ciudades, muy cerca del frente donde se desarrolla el conflicto.
En 2023 el festival de Eurovisión se realizará en Reino Unido, según ha confirmado la BBC. Todavía no se ha anunciado cuál ciudad será la sede del evento. Esta decisión se ha resuelto después de que Ucrania, el país ganador de 2022, haya reconocido que no puede acoger el festival por culpa de la guerra.
En Bruselas, los embajadores de los Veintisiete se han reunido para tratar de acercar posturas y poder aprobar este martes el plan de ahorro de gas propuesto por la Comisión Europea, un plan rechazado por varios países, entre ellos España y Portugal.
Rusia ha dicho hoy que no le interesa cerrar el grifo de gas a Europa. A pesar de ello, Bruselas se prepara para un invierno incierto. Tras las reticencias de algunos países a la propuesta de la Comisión Europea de recortes de consumo de gas del 15%, los Estados negocian ahora una mayor flexibilidad.
Los países intentan allanar el camino para que mañana sea posible un acuerdo en la reunión extraordinaria de ministros de Energía. Bastará con que una mayoría cualificada de países den su visto bueno para que las medidas salgan adelante. Fuentes diplomáticas se muestran optimistas y adelantan que se debaten cambios que suavizan la propuesta incial de la Comisión.
Hay dos principalesnovedades sobre la mesa. Primero, quién decide cuándo los recortes de consumo de gas pasar a ser obligatorios. Había países reticentes, como Polonia, a que Bruselas tuviera el poder de declarar la alerta. La idea ahora es que la Comisión Europea pueda tomar la iniciativa, también puedan impulsarla cinco países, pero la última palabra la tendría la mayoría de Estados miembro. Además, se pretende modular el alcance de dichos recortes obligatorios que han hecho que España alzara la voz. Aunque el 15% de ahorro hasta marzo sigue en pie, las capitales europeas trabajan en una serie exenciones que tengan en cuenta las circunstancias especiales de cada país, como la sequía, el almacenamiento o las interconexiones. Estos matices, cuya aplicación serían supervisados de Bruselas, permitirían rebajar el recorte obligatorio en caso de emergencia. Se busca así evitar el no de Portugal, Malta, Irlanda o España, que quieren hacer valer su capacidad de exportar gas al resto de países de Europa. Una idea que apoya Francia, partidaria de que los recortes no sean uniformes. Europa se esfuerza en ponerse de acuerdo, consciente de que no hacerlo le daría más fuerza a Rusia.
Liz Truss y Rishi Sunak, los dos candidatos a suceder a Boris Johnson en la jefatura del Gobierno británico, se enfrentan este lunes en su primer debate televisivo a dos bandas, en el que tratarán de captar votos entre las bases conservadoras en una elecciones marcadas por el cruce de acusaciones mutuas. El encuentro entre el exministro de Economía y la titular de Exteriores será retransmitido en directo a las 20 GMT por la cadena pública BBC, cuya presentadora Sophie Raworth hará preguntas a los aspirantes por tema, que completarán los directores de política, Chris Mason, y economía, Faisal Islam, ante una audiencia de votantes "tories".
Aunque la semana próxima habrá otro debate en Sky News y los candidatos harán mítines durante agosto, se considera que la cita de esta noche será crucial para ganar adeptos, pues se prevé que muchos miembros del Partido Conservador voten justo al recibir las papeletas, entre el 1 y el 5 de agosto.
El ganador de estas primarias, que se iniciaron con la elección de los finalistas por parte del grupo parlamentario conservador en la Cámara de los Comunes, se conocerá el 5 de septiembre, tras el receso parlamentario de verano.
Al día siguiente, Boris Johnson, aún primer ministro en funciones pese a dimitir el 7 de julio, presentará a la reina Isabel II su renuncia y la soberana encomendará a su sucesor que forme Gobierno.