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Decenas de miles de personas han salido a la calle para manifestarse en Barcelona y exigir la libertad la libertad de Jordi Sánchez y Jordi Cuixart, los dirigentes de la Asamblea Nacional Catalana y de Òmnium Cultural, que están en prisión preventiva por orden judicial desde el lunes. Una protesta que ha cobrado mayor importancia y la que se ha sumado el Govern en pleno, con Carles Puigdemont y Oriol Junqueras a la cabeza, para protestar por la puesta en marcha del artículo 155 de la Constitución, que amenaza con cesarles, reducir las competencias del Parlament y convocar elecciones en Cataluña.

El presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, no ha sido claro en su respuesta al requerimiento que le hizo el Gobierno para aclarar si proclamó o no la independencia de Cataluña en el pleno del pasado 10 de octubre y ha instado, una vez más, al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, a dialogar, para lo que ha dado un margen de "dos meses" con el fin de negociar una salida política al conflicto.

En una carta de dos folios dirigida al "apreciado" presidente Rajoy, se limita a asegurar, sobre esa supuesta Declaración Unilateral de Independencia, que "la suspensión del mandato político surgido de las urnas el 1 de octubre demuestra la firme voluntad de encontrar la solución y no el enfrentamiento".

Mientras, Ciudadanos, PSC y PP se muestran decepcionados con la respuesta de Puigdemont. La CUP sigue presionando para que aplique la declaración unilateral de independencia.

Declaración de independencia de Cataluña

Presión para Puigdemont

El consejo político de la CUP ha aprobado este sábado "exigir" al presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, que responda de forma "nítidamente afirmativa" al requerimiento del Gobierno sobre si ha declarado la independencia, que levante la suspensión de la misma y que proclame la República Catalana. Así lo ha explicado la portavoz del secretariado nacional de la formación independentista, Núria Gibert.

Posteriormente, el Consejo Político de la CUP ha propuesto celebrar un pleno extraordinario monográfico en el Parlamento catalán la próxima semana que termine con "la proclamación solemne del Estado catalán independiente en forma de República".

ERC, sin embargo, ha reiterado su apoyo a Puigdemont y pide "confianza" a las formaciones independentistas.

Los diputados de Junts pel Sí (JxSí) y la CUP han firmado un documento sobre la independencia de Cataluña, después de que el discurso del presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, amenazara con fracturar las filas independentistas.

En su comparecencia ante el pleno del Parlament, Puigdemont ha afirmado que asume el "mandato del pueblo" para que "Cataluña se convierta en un Estado independiente en forma de república", pero ha propuesto acto seguido "suspender los efectos de la declaración de independencia" para abrir en la puerta al diálogo en las próximas semanas.

La declaración de Puigdemont ha motivado los recelos de la CUP y también de ERC y Demòcrates, socios del PDeCAT en JxSí, porque a su juicio no representa una auténtica declaración de independencia, por lo que estos sectores han promovido un documento por escrito para dejar constancia, fuera del hemiciclo, de que la jornada del 1-O debe comportar la proclamación de la independencia.

La CUP ha pedido a la Generalitat que deje de trabajar con Caixabank, BBVA y Banco Sabadell, según asegura la diputada Eulalia Reguant en un medio digital, porque estas entidades siempre se han posicionado a favor de mantener el 'statu quo', el mismo día que el Banco Sabadell ha decidido que trasladará su sede social a Alicante. El vicepresidente del Govern Oriol Junqueras, ha asegurado que no habrá una fuga de empresas, algo que para la patronal catalana no tiene sentido.