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El director del Centro de Estudios de Asia Oriental e investigador principal del Real Instituto Elcano, Mario Esteban, desmarca la visita de los Reyes a China de las tensiones geopolíticas entre el gigante asiático y la Unión Europea o Estados Unidos: " El viaje no tiene motivación política" y explica que durante los últimos años los principales jefes de Estado mundiales han tenido visitas oficiales a China. Esteban defiende que España debe "buscar abrir nuevos mercados" y que China es un socio estratégico en sectores como el vehículo eléctrico. Mantiene que la visita de los monarcas busca "atraer inversiones". En este sentido, cree que España puede ser atractiva para China para invertir por "sus buenas infraestructuras" y porque siempre ha habido una "relación estable" entre los dos países.

La naturaleza golpea Jamaica y Filipinas con fuerza. En el caso del archipiélago asiático ha sufrido dos tifones en apenas una semana y ya van 21 en los que llevamos de año. Los expertos avisan que el calentamiento de los océanos tiene consecuencias. Los dos tifones han causado más de 200 víctimas mortales.

Foto: EFE

Los reyes ya están en China, acompañados por el ministro de economía, Carlos Cuerpo. El viaje pretende fortalecer lazos con la segunda economía del mundo y busca equilibrar la balanza comercial. La última vez que Felipe VI y Letizia fueron a China fue como príncipes en 2006. El ministro Cuerpo ya se ha reunido con empresarios chinos de sectores clave como el porcino, el farmacéutico o la automoción.

Foto: Casa de S.M. el Rey

Ahmed al Sharaa, antiguo comandante rebelde y hoy primer presidente interino de Siria, va a ser el primer jefe de Estado de ese país que visita la Casa Blanca. Una inédita situación porque hasta hace un año Estados Unidos llegó a ofrecer por él una recompensa de 10 millones de dólares. En sus primeros 10 meses de mandato, Al Sharaa ha intentado borrar su pasado yihadista y mostrar unidad y abrirse al exterior. Tuvo en Arabia Saudí su primera reunión con Donald Trump en mayo pasado.

Foto: Reuters/Jeenah Moon

Asusta ver cómo el supertifón Fung-wong se acerca a Filipinas. Ha tocado tierra en Luzón, la isla más poblada del país, donde se encuentra la capital. En Manila, cerca de 300 vuelos han sido cancelados.

Se le llama "supertifón" por la gran intensidad del viento: se prevén ráfagas de hasta 230 kilómetros por hora y vientos sostenidos de 185 kilómetros por hora.

Hay más de un millón de personas evacuadas. Las oficinas gubernamentales están cerradas y también las escuelas en varias regiones del norte y este del país. El presidente filipino mantiene el estado de emergencia nacional. Esta misma semana, otro tifón, el Kalmaegi, ha dejado más de 220 fallecidos.

Filipinas está acostumbrada a estos fenómenos naturales, pero cada vez son más intensos. La ciencia da la clave: es consecuencia directa del cambio climático. Cuanto más caliente está el océano, más energía tiene y más destructivo se vuelve.

Foto: Pandan Municipal Disaster Risk Reduction and Management Office

La guerra en Gaza ha supuesto un antes y un después para la sociedad israelí, que apoya mayoritariamente lo que ha hecho y sigue haciendo su ejército en la Franja. Por eso no es frecuente encontrar voces como la de Peter Beinart. Es judío, periodista y profesor en Estados Unidos. Él cree que Israel debe abandonar la persecución y el victimismo.

Beinart es una de las voces judías más influyentes del periodismo estadounidense, lleva años revisando la tradición judía y los derechos humanos. Ahora llega a España su cuarto libro, "Ser judío tras la destrucción de Gaza". Según el escritor, "el horror del 7 de octubre, el sufrimiento del 7de octubre está muy, muy presente en el discurso judío dominante".

El título ya es una declaración de intenciones, nos cuenta que el horror del día de los atentados de Hamas está muy presente en la comunidad judía, pero no lo que ha hecho Israel antes y después de los ataques de Hamas.

Interpela directamente a su comunidad, de hecho, el libro empieza con una carta a un amigo, con el que lleva años sin hablar por diferencias políticas. Le tiende la mano para convertir la discrepancia en un puente, pero por ahora no ha obtenido respuesta. Sin embargo, sí ha podido abordar conversaciones incómodas con algunos de sus lectores ya que muchos piensan diferente a él.

Beinart señala que "una de las cosas que me ha gratificado es que he tenido personas que me han dicho que le dieron el libro a familiares con los que no estaban de acuerdo sobre esto y les ayudó a tener conversaciones sobre este tema". Beinart no busca que cambien de opinión, pero sí abrir un debate real sobre igualdad de derechos y rendición de cuentas. Explica desde su perspectiva que el discurso actual es perjudicial, no sólo para los palestinos, sino también para los judíos.

Imagen: AFP / OMAR AL-QATTAA

En Alemania el gobierno está negociando un acuerdo muy polémico con los talibanes. El canciller Merz quiere enviar a Afganistán a los ciudadanos afganos condenados por delitos graves en su país. El hecho de negociar con los fundamentalistas preocupa a las organizaciones humanitarias y a los militares que estuvieron dos décadas en aquel país, combatiendo en zona hostil.

En el último año, con la mediación de Catar, Alemania ha expulsado a Kabul a un centenar de afganos con delitos. Ahora el Gobierno negocia directamente con los talibanes, un régimen que solo Rusia reconoce. Durante 20 años, Alemania envió a 150.000 soldados a combatirlos bajo el paraguas de la OTAN, donde murieron 59.

Colaboradores afganos del ejército alemán que huyeron a Pakistán han recibido una propuesta desde Berlín, recibir hasta 12.500 euros si renuncian al asilo en Alemania. Las organizaciones humanitarias piden cautela a los países que planean devoluciones.

Según la representante de Acnur en Alemania, Katharina Thote, "la situación sigue muy complicada y retornos masivos pueden desestabilizar aún más el país". El canciller Merz quiere mostrar su eficacia para reducir las peticiones de asilo por un lado y expulsar también a delincuentes extranjeros. El precio ahora es ofrecer diálogo directo a los talibanes, que ya han obtenido permiso para enviar a dos diplomáticos a Alemania.

Imagen: EFE / ANDRE COELHO