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En su gira por Oriente Medio, el presidente estadounidense, Donald Trump, ha visitado Arabia Saudí, Catar y Emiratos Árabes Unidos, pero no ha pisado Israel. Una señal, y no es la única, de lo que se interpreta como un intento de marcar ciertas distancias. Así respondía el republicano a la pregunta de si estaba dejando de lado a su histórico aliado en la región: "Para nada, esto es bueno para Israel. Tener una relación como la que tengo con los países de Oriente Medio, esencialmente con todos, creo es muy bueno".

En lo referente a Gaza, Trump ha pasado de entusiasmar al primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, con su plan de construir una Rivera allí, a hablar de la terrible situación que atraviesa la Franja y decir que hay gente muriendo de hambre.

Foto: EFE/EPA/UAE PRESIDENTIAL COURT

Jussef, un niño gazatí, llora la muerte de sus dos hermanos bebés, víctimas de los recientes bombardeos israelíes en Gaza, que han dejado más de 100 muertos en apenas unas pocas horas. Por otro lado, en Cisjordania, tras el asesinato de la colona Tzeela Gez, una mujer embarazada ha sido alcanzada por un francotirador.

El ejército israelí ha intensificado las redadas. El ministro de Finanzas de ese país y también colono, Avigdor Lieberman, ha exigido una respuesta militar contundente contra los “terroristas”.

El aumento de la violencia se produce durante el 77 aniversario de la Nakba, la fecha en que los palestinos recuerdan que la creación del Estado de Israel supuso para muchos de ellos la perdida de sus casas y los convirtió en refugiados.

IMAGEN: HAITHAM IMAD

Más de 100 civiles han sido masacrados en Gaza, en un ataque en el norte de la capital. La situación se ha producido después de que este miércoles varios bombardeos dejaran al menos otros 70 muertos. En '24 Horas de RNE' hablamos con Patricia Garrido, delgada de Cruz Roja en Palestina: "Los ataques se han intensificado en las últimas horas y se siguen produciendo nuevas órdenes de evacuación en el norte y en el sur". Califica como "extremas" las condiciones humanitarias: "Solamente el 3% de la población tiene comida para dos días en casa, un claro deterioro respecto a la situación desde hace medio año".

Desde Cruz Roja relatan que hay gran parte de la población "hacinada en lugares muy pequeños", ya que el espacio de la Franja es reducido y se agrava porque "hace dos meses y medio que está completamente bloqueada y no nos es posible entregar materiales". Sin embargo, la organización sigue "ofreciendo servicios de atención, de salud y de emergencia con 21 ambulancias operativas y dos hospitales". Además, reconocen que está siendo "un reto mantener los suministros de agua, electricidad y gasolina para los hospitales y vehículos de rescate".

Desde el 2 de marzo, Israel bloquea la entrada de ayuda humanitaria a Gaza, dejando a más de dos millones de personas sin alimentos, agua ni medicinas. Organizaciones como World Central Kitchen y la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina en Oriente Próximo (UNRWA) han detenido su actividad por falta de suministros básicos, mientras que las cocinas comunitarias cierran una tras otra.

La UNRWA ha alertado de cómo en Gaza hay más de 9.000 niños con desnutrición aguda. Israel propone controlar y distribuir la ayuda en zonas militarizadas, pero Naciones Unidas y más de 200 ONG se niegan a colaborar, denunciando que esa medida viola los principios humanitarios y pone en riesgo a los civiles. A su vez, acusan a la comunidad internacional de inacción ante el uso del hambre como arma.

Durante su gira por Oriente Próximo, el presidente estadounidense, Donald Trump, ha sugerido que EE.UU. debería controlar Gaza para transformarla en una "zona de libertad". Un anuncio que se produce en medio de una nueva ofensiva israelí sobre la Franja que ha dejado más de 150 muertos, incluidos numerosos niños. El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, condiciona el alto el fuego a la liberación parcial de los rehenes por parte de Hamás.

La violencia se intensifica en la Franja y Cisjordania coincidiendo con el Día de la Nakba, jornada simbólica para los palestinos y que recuerda al éxodo que sufrieron hace casi 80 años. El ejército israelí ha llevado a cabo redadas tras el asesinato de una colona, mientras miembros del Gobierno piden extender la ofensiva a Cisjordania, lo que muchos palestinos interpretan como una repetición de la Nakba de 1948.

Israel ha convocado para este jueves una reunión de amonestación a la embajadora española, Ana Salomón Pérez, tras las declaraciones del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que ha calificado el país como un "Estado genocida".

La convocatoria se ha producido después de que Sánchez haya dicho este miércoles durante la sesión de control al Gobierno en el Congreso que España no comercia "con un Estado genocida", en respuesta a las acusaciones del portavoz de ERC, Gabriel Rufián, de hacerlo.

"Le puntualizo una cosa, señor Rufián. Nosotros no comerciamos con un Estado genocida. No lo hacemos, señoría. Y creo que el otro día desde esta tribuna especifiqué precisamente de qué estábamos hablando cuando se hablaba de algunas cosas que no se ajustan a la verdad", ha dicho Sánchez.

El emir de Catar ha recibido a Donald Trump y juntos han pasado revista a la guardia en una recepción con todos los honores. Era el preludio a la firma de acuerdos comerciales por valor de 1,2 billones de dólares en inversiones y compras por parte de los cataríes. El país del Golfo Pérsico era la segunda parada de la gira internacional de Trump. El encuentro entre ambos mandatarios supone un paso hacia la normalización de las relaciones entre Estados Unidos y Siria, a la que Washington llegó a incluir en el llamado eje del mal. Algo que puede redefinir los equilibrios políticos y de poder en Oriente Próximo.

En su primera gira por Oriente Próximo tras ser reelegido como presidente de EE.UU., Donald Trump ha anunciado que levantará las sanciones contra Siria. “Tras hablar de la situación en Siria con el príncipe heredero y con el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, que me pidió el otro día algo muy similar, y son amigos míos que respetan mucho Oriente Medio, voy a levantar las sanciones contra Siria”, ha dicho el mandatario estadounidense durante un discurso en un foro de inversiones en Arabia Saudí.

La decisión de Trump supondrá un alivio para la población siria, muy castigada tras 14 años de guerra y sanciones internacionales. Aunque estas sanciones se impusieron con el objetivo de ahogar al Gobierno de Al Asad, afectaron profundamente a la sociedad civil, dificultando la entrada de ayuda humanitaria y remesas de sirios en el extranjero.

Las nuevas autoridades sirias han celebrado la decisión de Trump, que se ha reunido con el presidente interino de Siria, Ahmed Al Shara. El nuevo presidente sirio fue el fundador de la exfilial siria de Al Qaeda, entonces conocida como Frente al Nusra, e incluso permaneció detenido durante casi un lustro por las tropas estadounidenses en Irak, donde Al Sharaa luchó contra ellas como parte de la red terrorista tras la invasión de 2003.

Sin embargo, desde la caída de Al Asad y su consecuente posicionamiento como hombre fuerte de Siria, varias delegaciones estadounidenses de congresistas, empresarios e incluso representantes oficiales han visitado Damasco.