Castilla: el saber y el sabor ibéricos

• Pili llega a Castilla dispuesta a descubrir dos de sus instituciones mundialmente conocidas: la Universidad de Salamanca y el jamón
• Pero Salamanca no es sólo estudiar, también tiene una tradición muy relacionada con la fiesta: los tunos
• Pili viaja hasta Guijuelo para conocer los secretos del jamón en la dehesa castellana

Pili llega a Castilla dispuesta a descubrir dos de sus instituciones mundialmente conocidas: la Universidad de Salamanca y el jamón. En la capital charra se dirige a la Universidad de Salamanca, que se hizo famosa durante la Edad Media bajo el lema “Lo que la naturaleza no da, Salamanca no presta”, que significa que el talento nace, no se hace. Aunque sea en una gran universidad. Acompañada de Eduardo, Pili visitará la Biblioteca General Histórica de la Universidad y se acercará a tocar algunos de los numerosos incunables de los que disponen. Y también descubrirá objetos curiosos que se han encontrado dentro de los mismos.

Pero Salamanca no es sólo estudiar, también tiene una tradición muy relacionada con la fiesta: los tunos. Pero no unos tunos cualesquiera, sino un grupo muy especial: la tuna femenina de la Universidad de Salamanca. Descubrirá cómo son los ensayos del grupo y luego los acompañara a recorrer la noche de cantos por residencias universitarias y bares de la ciudad.

Empapados del carácter charro, Pili y Kenzie ya están preparadas para visitar las montañas castellanas: la Sierra de Gredos, a la que Unamuno definía como “el techo de Castilla”. Allí conocerá a Hugo, un joven monitor especializado en rafting que la prepara en los secretos de este deporte. Con unas pocas indicaciones, Pili ya está preparada para descender el Tormes.

Para recuperarse de todo el esfuerzo, Pili y Kenzie se dirigen a un lugar encantador llamado Cabezas Bajas, un pequeño pueblecito de Ávila donde conocen a Pilar. Una señora que ha recuperado el pueblo y lo ha destinado al turismo rural. Con ella Pili aprende a ordeñar las cabras y siente la naturaleza en estado puro.

Como se ha quedado con más ganas de monte, Pili viaja hasta Guijuelo para conocer los secretos del jamón en la dehesa castellana: Guijuelo. Visitará una finca en la que los cerdos ibéricos pacen libres y se alimentan de las bellotas que les confieren su sabor único. En el reino del jamón Pili conoce también a Chus Merino, un enamorado de la gastronomía del cerdo que la lleva a un secadero de jamón, y envueltos en su penetrante olor, conoce los secretos de este manjar.

Pili y Kenzie llegan al final de los dominios castellanos atravesando las Murallas de Ávila. El recinto medieval mejor conservado de España que además se encuentra en una ciudad que ha ganado un premio por su accesibilidad. Allí se despedirá de Castilla.