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Altadis cierra su planta en La Rioja tras 126 años de actividad

  • La compañía achaca el cierre a la caída de ventas en los últimos años
  • Los empleados serán recolocados o saldrán de la empresa con indemnización
  • La decisión afecta 466 personas

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Proceso de fabricación de cigarrillos en la planta riojana de Altadis
Proceso de fabricación de cigarrillos en la planta riojana de Altadis.

La multinacional tabaquera Altadis concluye este viernes su actividad en La Rioja con el cierre de la planta que la compañía tiene en el polígono de 'El Sequero', en Agoncillo. Con esta decisión, anunciada el pasado 19 de enero, la empresa pone fin a 126 años de historia en la región y justifica su decisión por la caída del volumen de ventas en España.

De los 466 trabajadores afectados, 19 seguirán trabajando en su desmantelación hasta que les llegue la edad de jubilación, otros 33 se trasladarán a la fábrica de Entrambasaguas (Cantabria) y ocho se irán a Alemania. Asimismo, otro centenar abandonará la compañía previa indemnización y, según ha explicado la empresa, casi una treintena ha podido recolocarse en La Rioja gracias al apoyo de una empresa externa especializada contratada por Altadis.

Como ya hiciera tras el anuncio del cierre, la dirección de Altadis ha señalado este viernes, en declaraciones a la Agencia Efe, que lamenta "las complejas circunstancias del mercado" que han provocado "una drástica caída de los volúmenes de ventas de cigarrillos durante los últimos años" y han obligado a la compañía a tomar "una decisión que nunca le hubiera gustado anunciar".

Por su parte, el comité de empresa asegura que "dentro de lo malo que es un cierre, se ha podido ofertar a casi todos los trabajadores la opción de poderse quedar dentro de Imperial Tobacco (multinacional británica a la que pertenece Altadis)". Sin embargo, señalan que aún quedan seis trabajadores que quieren continuar en la empresa para los que esperan una solución en 2017.

Aunque el cierre estaba previsto para el pasado 30 de junio, las negociaciones entre la multinacional y el Comité de Empresa permitieron alargarlo hasta este 31 de diciembre. No obstante, la fábrica produjo su último cigarrillo el pasado el 30 de noviembre, a las 13:14 horas.

Caída de ventas en España

Tras conocer el anuncio del cierre, los trabajadores se movilizaron y manifestaron por las calles de Logroño y llevaron a cabo un encierro en la propia planta para presionar a la compañía. Asimismo, el Gobierno de La Rioja, a través de la consejera de Desarrollo Económico e Innovación, Leonor González, señaló que era una de las "peores noticias" para la sociedad y la economía riojana y puso en marcha una serie de reuniones y encuentros para intentar revertir y minimizar esta decisión.

Durante estos encuentros, llevados a cabo a caballo entre Londres y Madrid, los trabajadores lograron ampliar el plazo del cierre y llegaron a un acuerdo definitivo que se ratificó el 12 de mayo.

Para el comité de empresa de la planta riojana, esta situación es "una coma de un sigue" dentro de la política del grupo británico Imperial Tobacco, que ha anunciado cierres y reestructuraciones en centros de Francia, Rusia, Alemania e Inglaterra.

En los últimos 16 años, la compañía ha cerrado un total de 12 fábricas en España, lo que ha supuesto la salida de unos 6.000 trabajadores.

En España, Altadis ha sufrido una caída de ventas en volúmenes de cigarrillos de más del 45% en los cinco últimos años. La tabaquera ha achacado este descenso a dos factores que se han agravado en ese período: la presión regulatoria sobre el tabaco y el considerable aumento del comercio ilícito, provocado por la crisis y cuyo índice se estima en el 10,6% de las ventas legales.