Reacciones dispares a las declaraciones de los obispos sobre el aborto

• Rajoy asegura que votará en contra pero no porque se lo diga nadie
• El PSOE recuerda que esta ley mejora la que había durante el gobierno del PP
• Otros grupos critican la "hipocresía" y el uso político que la CEE hace del aborto

Contestación de los grupos parlamentarios al mensaje de la Conferencia Episcopal

Reacciones de todo tipo se han escuchado este jueves después de que la Conferencia Episcopal Española haya hecho público un documento de once páginas en el que explica los motivos por los que se posiciona en contra de la ley del aborto que propone el Gobierno e insta a todos los católicos a votar contra la misma.

El presidente del Partido Popular, Mariano Rajoy, ha asegurado que votará en contra de la ley pero "no porque lo diga nadie". Rajoy cree que esta ley es un "disparate", pero ha evitado valorar las declaraciones de los obispos.

En la misma línea se ha manifestado el portavoz de CiU en el Congreso, Josep Antoni Duran i Lleida, quien ha confirmado su rechazo a la ley pero enfatizando que "yo me expreso en mis propios términos y no en el de los obispos", según ha dicho en la Cámara Baja.

El PSOE recuerda que la "única moral posible es la de la Constitución"

Ante la afirmación de la Conferencia Episcopal de que la ley del aborto es una "fuente envenenada de inmoralidad e injusticia", el portavoz del PSOE en el Congreso, José Antonio Alonso, ha recordado este jueves que "en el ámbito de lo público la única moral posible es la de la Constitución".

También desde el Partido Socialista, el ministro de Fomento y vicesecretario general del grupo, José Blanco, ha denunciado la "hipocresía" de aquellos que arremeten contra una ley que, a su parecer, mejora la que existía durante los años de gobierno del PP.

Según Blanco, esta ley "sólo se diferencía de la anterior en que tiene más garantías para las mujeres y para los profesionales que practican abortos dentro de la legalidad".

Unión, Progreso y Democracia, el partido liderado por Rosa Díez, coincide con la Conferencia Episcopal en que al abortar se elimina una vida humana y por ello ha reclamado más prudencia a la hora de legislar sobre la interrupción voluntaria del embarazo, al tratarse de una ley que "genera una clara división entre los españoles".

Críticas a los obispos desde otros grupos

La Federaciones de Asociaciones para la Defensa de la Sanidad Pública (FADSP), ha criticado el documento de los obispos, en el que ve la misma "intolerancia" de siempre.

Su portavoz, Marciano Sánchez Bayle, cree que en el documento hecho público este jueves por la CEE hay consideraciones "desacertadas y peligrosas".

Por otra parte, la Fundación Mujeres ha llevado el tema de la interrupción voluntaria del embarazo a un plano político y ha lamentado que a los obispos no les interesase el aborto cuando gobernaba el Partido Popular y ahora sí.

En palabras de la vicepresidenta de esta fundación, Marisa Soleto, la CEE "tiene sus propios intereses políticos a los que responden sus manifestaciones; que nadie se lleve a engaño".