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Balonmano | Liga de Campeones

El Barça culmina la remontada ante el Atlético y estará en la Final Four de balonmano

  • Victoria de los azulgrana por 32-24 con un Palau volcado
  • El meta Saric y el goleador Rutenka, claves de la victoria

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El Barça remonta al Atlético para alcanzar la Final Four

Ficha técnica:

32. FC Barcelona Intersport (15+17): Saric (Strbik p.s.); Juanín (4, 1p), Tomàs (4), Gurbindo, Jernemyr, Rutenka (11, 3p) -siete inicial-, Noddesbo, Sorhaindo (1), Sarmiento (1), Montoro (4), Aguirrezabalaga, Stranovsky, Rocas (1), Morros, Entrerríos (4) y Gurbindo (2).

24. BM Atlético de Madrid (9+15): Hombrados; Kallman (1), Aguinagalde (12, 2p), García Parrondo, Cañellas (1), Balic (2) -siete inicial-, Miguel Sánchez, Edu Fernández, Álvaro Ferrer, Ángel Romero, Davis (1), Jurkiewicz, Golun, Masachs y Lazarov (7, 3p).

Árbitros: Geipel y Helbig (Alemania). Excluyeron a Aguinagalde (min.7), Golun (min.17) y Ferrer (min.47) por el Atlético de Madrid y a Jernemyr (min.26 y min.35) y Tomàs (min.41) por el Barcelona.

Parciales cada cinco minutos: 2-1, 4-3, 17-3, 11-3, 13-6, 15-9 -primera parte-, 17-11, 20-11, 22-15, 24-18, 28-21, 32-24.

Incidencias: partido de vuelta de los cuartos de final de la Liga de Campeones disputado en el Palau Blaugrana ante 6.521 espectadores.

El FC Barcelona Intersport se clasifica para la Final Four de balonmano tras ganar 32-24 al BM Atlético de Madrid, remontando así los cinco goles de ventaja que se traían los rojiblancos de la ida en Vistalegre. Las paradas del meta Saric y los once goles de Rutenka, resultaron claves.

Los de Dujshebaev se encontraron con un Palau muy intenso y una diferencia de nueve tantos a los 20 minutos (12-3). Respondieron de la mano de Aguinagalde (12 dianas), aunque no pudieron repetirlo tras la reanudación. El intercambio de goles acercó paulatinamente la victoria al Barça, que no cedió menos de seis de ventaja.

El Atlético de Madrid no escondió ni un momento sus intenciones. Quería abusar de su renta de cinco goles de la ida e imprimió al partido un ritmo lento. Posesiones largas y riesgos mínimos. Esto funcionó durante el primer tramo del partido. En los diez minutos iniciales el marcador era de 4-3, sin alarmismos.

En el bando culé, las paradas de Saric calmaron los nervios iniciales y los cuatro goles de Rutenka -hasta el minuto diez sólo marcó él- aguantaban el duelo. Entonces surgió Víctor Tomàs para dar el impulso definitivo a su reacción. Con dos goles seguidos, puso el 7-3 en el marcador y obligó a Dujshebaev a pedir tiempo muerto.

Sirvió de poco, ya que un lanzamiento de Rutenka y uno de Juanín justo después elevaban la distancia a seis (9-3, min.17) y rompían la ventaja inicial. La defensa de Hombrados pasaba por un mal momento y ninguna de sus referencias ofensivas funcionaba. Saric estaba inspirado y hasta detuvo tres penaltis consecutivos.

El Barça se creció y borró cualquier duda de un plumazo. El Palau disfrutaba con una exhibición y el Atlético buscaba soluciones. Balic rompió el parcial de 9-0 con un tiro muy forzado (12-4, min.21). Le siguieron dos tantos seguidos de Aguinagalde (12-6), algo que volvió a normalizar el tanteo del encuentro.

Pese a los intentos de ambos equipos, el choque mantenía toda la emoción al descanso (15-9). En la reanudación, el arranque del Barcelona aceleró el partido. Aunque la defensa rojiblanca mejoró al principio, sufrieron en diez minutos con un 5-2 en contra (20-11, min.40). Saric, ovacionado, amarraba la diferencia.

El Atlético de Madrid sacó fuerzas de los goles de Aguinagalde, su hombre más destacado, y se recompuso (23-17, min.48). Esta distancia se mantuvo durante varios minutos, con Juanín como máximo argumento catalán y con Lazarov y Cañellas en el rojiblanco. El pulso se mantuvo hasta los instantes finales del encuentro.

Los de Talant habían mejorado, pero nunca pudieron rebajar la diferencia de seis goles pese a superar las 20 dianas del Barcelona en la ida. Los azulgrana aguantaron la intensidad hasta el final y sentenciaron el choque ante una euforia gigantesca en el Palau Blaugrana. El próximo reto, triunfar en la Final Four de Colonia.