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Japón recuerda hoy a las 19.000 víctimas del tsunami que hace dos años arrasó el noreste del país y provocó en Fukushima la mayor crisis nuclear en 25 años. El desastre supuso el cierre de la mayoría de los reactores del país, aunque el nuevo gobierno nipón se ha mostrado partidario de reactivar la energía atómica.

Hace dos años, un 11 de marzo de 2011, a las 2.46 de la tarde hora local, la tierra tembló de forma devastadora en Japón. Media hora más tarde un monstruo de agua de diez metros se adentraba en las costas del noroeste del país arrasando lo que todavía estaba en pie y provocando el colapso de la central nuclear de Fukushima: el peor accidente atómico tras Chernobyl. De la tragedia quedan las heridas abiertas por la muerte y desaparición de más de 19.000 personas, el empeño de un eficaz país por reponerse y reconstruir su desolado paisaje, y un debate sobre la energía nuclear.

Hablamos con el profesor Eduardo Gallego, catedrático de Energía Nuclear de la Universidad Politécnica de Madrid.

Japón ha reconocido que algunas de sus plantas realmente no estaban diseñadas con la suficiente robustez para hacer frente a las catástrofes naturales. La reapertura de las plantas solo se hace si se cuenta con el permiso de las autoridades locales, seguramente no volverán a abrir todas las centrales del país.

En temas de energía el apostar por una fuente no es lo más inteligente. Tienen que apostar por las renovables manteniendo las nucleares que sean más seguras (11/03/13).

Japón conmemora hoy, con memoriales y actos oficiales, el segundo aniversario del terremoto de 9 grados en la escala Richter y el devastador tsunami que arrasó el noreste del país y causó más 18.500 muertos y desaparecidos, además de la crisis nuclear en Fukushima.

A las 14.46 hora local (05.46 GMT), la misma en la que se registró el seísmo, millones de japoneses guardarán un minuto de silencio para recordar a las víctimas de la tragedia, la peor que ha vivido el archipiélago desde la II Guerra Mundial.

En Japón, cientos de personas han salido a las calles de Tokio, para pedir el cierre de las centrales nucleares, cuando se cumple el segundo aniversario de la tragedia de Fukushima. Ahora, el gobierno japonés ha ordenado crear una comisión para acelerar el desmantelamiento de los seis reactores de Fukushima 1, un trabajo lento e inseguro, hasta que los niveles de radiación no disminuyan. De hecho, sigue habiendo una zona de exclusión de 30 kilómetros en torno a la central.

Un potente terremoto de magnitud ocho en la escala de Richter ha sacudido el este de las Islas Salomón a primera hora de la madrugada, provocando al menos cinco muertos y una breve alerta por tsunami en el Pacífico.

"Tenemos cinco muertos y tres heridos. Una de las personas muertas es un niño, las otras son tres mujeres y un hombre mayores", ha declarado a AFP Chris Rogers, enfermera del hospital de la ciudad de Lata, situada en la isla de Santa Cruz.

El seismo ha provocado un tsunami de 0,9 metros de altitud, que en algunas zonas de la costa ha llegado a 1.5 metros. El Centro de Alertas de Tsunami del Pacífico, situado en Hawai, emitió una alarma, que canceló horas después.

No obstante, la Agencia Meteorológica de Japón ha declarado la alerta amarilla en su costa oriental y ha advertido que espera olas de 50cm en las costas de Hokkaido (norte), Kyushu (sur) y Okinawa.

Conmoción en Japón donde se han recibido como un insulto unas declaraciones del Ministro de Finanzas en las que pide a los ancianos que "se den prisa en morir" para reducir el gasto del Estado. Un 25% de la población en Japón, donde se venera especialmente a la tercera edad, tiene más de 60 años.