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El PSOE trata de pasar página tras la dimisión de Pedro Sanchez y recomponer su situación interna. En medio de esta crisis, el exsecretario general de los socialistas rompió anoche su silencio. Sánchez arremetió contra Susana Díaz y defendió que su partido se debe acercar a Podemos. Esas palabras han caído de muy distintas maneras en el PSOE, donde los más molestos le piden que haga más autocrítica y apelan a su dignidad.

La bancada socialista ha estado dividida en la sesión de investidura, a pesar del mandato del Comité Federal de que todo el grupo socialista votara por la abstención. En total se han abstenido 68 diputados, lo que ha facilitado la investidura de Mariano Rajoy, y han votado en contra 15 socialistas. Entre los diputados del PSOE que se han abstenido, varios han añadido por delante la coletilla "por imperativo".

La sesión del debate de investidura de este jueves empezaba con la intervención del portavoz socialista, Antonio Hernando. Y había expectación por saber cómo iba a defender el viraje del PSOE del no de hace tres meses a la abstención del próximo sábado. Y lo ha hecho argumentando que es el único medio de evitar que se celebren unas nuevas elecciones generales, por tercera vez en un año.

Según Hernando, las razones por las que su partido no confía en Rajoy son, entre otras, los recortes, la limitación de derechos, la pasividad ante la pobreza, la desigualdad y falta de reacción ante la corrupción.

El exsecretario general del PSOE Pedro Sánchez ha avanzado hoy que mañana votará "no" a la investidura del candidato del PP, Mariano Rajoy, junto al resto de sus compañeros del grupo socialista, pero no ha desvelado si se abstendrá en la segunda votación: "El sábado será otro día".

Sánchez ha entrado muy sonriente al hemiciclo para asistir a la primera sesión del debate de investidura y ha saludado a los periodistas preguntándoles que tal estaban, después de varias semanas sin acudir al Congreso desde que dimitió de su cargo. Ha saludado a casi todos sus compañeros, entre ellos el portavoz parlamentario, Antonio Hernando, el expresidente del Congreso Patxi López y el diputado Eduardo Madina.