Enlaces accesibilidad
arriba Ir arriba

El asesinato de Villavicencio viste de luto la recta final de la campaña presidencial en Ecuador. El domingo 20 de agosto se celebra la primera vuelta. El presidente ha decretado el estado de excepción y la movilización militar para garantizar la seguridad en la calle. No es el primer político asesinado en Ecuador en periodo electoral. El alcalde de Manta, Agustín Intriago, fue tiroteado hace un par de semanas.

El país convive y malvive con una violencia organizada consolidada en motines carcelarios y que ha ganado músculo en la calle. Los homicidios aumentan. Buena parte de ellos, vinculados al narcotráfico, en un país situado entre dos grandes productores de droga, Colombia y Perú, y cuyos puertos son fundamentales para exportarla a Europa. En algunas provincias el narco y las bandas criminales le disputan el poder al Estado. Y sin políticas a largo plazo, dicen los expertos, será difícil ganarles el pulso.

Foto: Imagen de archivo de Fuerzas Armadas ecuatorianas durante un decreto de excepción (EFE/ Marcos Pin)

"Los Lobos", considerada la segunda banda criminal de Ecuador, con más de 8.000 miembros, ha difundido este vídeo en el que reivindica el asesinato del candidato a la presidencia del país, Fernando Villavicencio, ocurrido tras un acto de campaña.

Rodeado de un grupo de personas armadas y con pasamontañas, un portavoz de la banda, que dice hablar en nombre de los "máximos dirigentes" dijo que volverá a ocurrir cuando los corruptos no cumplan su palabra".

Según el comunicado, otros políticos que "no cumplan la promesa que establecimos cuando reciban nuestro dinero, que son millones de dólares, para financiar su campaña, serán destituidos". Y mencionan en concreto a otro candidato, a Jan Topic advirtiéndole que si no cumple, le ocurrirá lo mismo que a Villavicencio.

La 'Ndrangheta calabresa es hoy por hoy la mafia más poderosa en Italia y una de las principales en Europa. Las últimas operaciones policiales contra su organización mafiosa dejan solo en el último mes más de un centenar de detenidos en varios países europeos, entre ellos España. Se estima que el narcotráfico les renta el equivalente al presupuesto anual de nuestro país.

Foto: Getty

Son organizaciones criminales, violentas y muy peligrosas. El ministerio de Interior vigila en España a más de seiscientas bandas juveniles, cerca de un centenar de origen latino. Operan por todo el país, pero sobre todo en las grandes ciudades, especialmente en Madrid y Barcelona. En en el último año se han reactivado, están mejor armadas y se llevan peor. Luchan a muerte por el territorio, reclutan a niños de doce años y ya han atrapado a más de dos mil quinientos pandilleros, sólo en la capital.

Los dos protagonistas de este reportaje son Kevin y Jenny. Él entró en una banda latina a los catorce años. Los quince siguientes los pasó entre reyertas, machetes y la cárcel. Jenny entró por amor. A los doce años ya es la novia de un jefe y a partir de ahí, la pesadilla.

Hicieron mucho daño, lo pagaron y se arrepienten. Lograron salir de su banda y escapar de los enemigos con el apoyo del Centro de Ayuda Cristiano de la Iglesia Evangélica. Sólo cuando sus bandas tuvieron la certeza de que no eran una amenza, dejaron de tomar represalias. En este reportaje cuentan su historia junto con los testimonios de dos policías de la Brigada Provincial de Información de Madrid y de Participación Ciudadana.

Un reportaje de Elena Pernas, Alejandro Martínez del Hoyo y Javier Monterde.

Las bandas criminales no son nuevas en Haití. Las élites políticas y económicas las utilizan desde hace años para llegar al poder o mantenerse en él. Les sirven para obtener votos o aplastar protestas. En el país hay unas 200 bandas, la mayoría en Puerto Príncipe y agrupadas en dos grandes coaliciones rivales, la GPEP y la G-9, que ya controlan el 100% de la ciudad. Sus acciones profundizan la crisis humanitaria y entorpecen el acceso a la salud y a la educación. Las bandas masacran, mutilan, queman, violan, secuestran, extorsionan... pero sus líderes, lejos de esconderse, se presentan como benefactores o estrellas musicales. El Consejo de Seguridad de la ONU ha sancionado a unos y otros pero sigue sin aprobar una misión en apoyo a la Policía haitiana, incapaz de restaurar la paz en el país.

Foto: Integrantes de un grupo de autodefensa posan con machetes en un barrio de la comuna de Petion-ville, en Puerto Principe (EFE/Johnson Sabin)

Portugal se incautó el año pasado de 16 toneladas de cocaína. Cada vez llega más droga al país como vía de entrada a Europa. Tiene mucho que ver la mayor organización criminal de Brasil, el Primer Comando de la Capital, más conocido como PCC. Empezó siendo un sindicato para defender los derechos de los presos brasileños en los años 90. En la actualidad, es una de las organizaciones más poderosas del mundo de la droga, muy vinculada con la mafia italiana de Calabria, la Ndrangheta. La presencia del PCC en Portugal se ha confirmado con las detenciones de cuatro de sus miembros reconocidos por la banda.

Foto: Fardos de cocaína (Getty Images)

La Guardia Civil y la Policía Nacional Francesa han detenido a diez personas e incautado más de once toneladas de droga a una organización criminal dedicada al tráfico internacional de drogas entre Marruecos y España con otros países europeos como Francia, Italia, Bélgica, Holanda y Rumanía. Los 9.600 kilos de hachís y 1.450 kilos de marihuana incautados podrían haber alcanzado los 100 millones de euros en el mercado.

Foto: Paquetes de hachís incautados por la Guardia Civil (Archivo) ROBER SOLSONA/EUROPA PRESS