Receta de crema de calabaza: la más fácil y rápida

• Descubre la forma más sencilla y sabrosa de preparar una crema de calabaza, ideal para los días de frío
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Receta de crema de calabaza

Con el frío como protagonista, los platos calientes y de cuchara son siempre una buena opción. Por ese motivo y porque está deliciosa, en Ahora o Nunca, el magacín presentado por Mónica López, se han traslado hasta Vizcaya para descubrir una saludable, natural, fácil y rápida crema de calabaza y lo han hecho de la mano del chef Unai del restaurante Gozkoetxe Jatetxea.

Crema de calabaza
Crema de calabaza 

verduras

Ingredientes

Preparación

Calabaza Patata Puerro Nata Sal Aceite Jamón serrano

Pelar, lavar y cortar la calabaza, la patata y el puerro en trozos pequeños. Echar en una olla y hervir. Una vez cocida, retirar la calabaza, la patata y el puerro y llevar a la batidora reservando el agua de la cocción. Batir e ir echando el agua de la cocción según la textura que se desee (más o menos líquida). Una vez triturada la mezcla, echar un chorro de nata, sal al gusto y volver a batir. Servir la crema en un plato, echar un chorro de aceite y esparcir unos trozos de jamón para una deliciosa explosión de sabor en boca.

Curiosidades de la calabaza

Según nos ha confesado Javi, un agricultor del País Vasco, la calabaza era un producto de relleno que usaban los agricultores para tapar las zonas que no estaban cultivadas: "Era una manera de rellenar y alimentar a los animales". Además, ha explicado en Ahora o Nunca, que, la teoría dice que es fácil cultivar y que salen muy fácilmente, pero la práctica es más bien todo lo contrario.

Hay muchos tipos de calabazas, la mallorquina, la bonetera, la japonesa o la vasca de cacahuete entre otras. Esta última es ideal para elaborar una deliciosa crema. En cuando a su proceso de producción, una calabaza suele tardar 3 meses en hacerse. El truco es no cogerlas todas a la vez, sino según se vayan haciendo. Además, identificar su punto no es fácil, tiene que tener un poco de color rojizo por abajo.

Por otro lado, una calabaza que no se vaya a consumir en el momento, lo ideal es conservarla en un sitio seco, con poca luz y en silencio. Esto último, insiste Javi el agricultor, que es muy importante: “La calabaza tiene que estar dormida en su sitio. Sin golpear, sin mover y sin maltratar. Dejarla tranquila y que duerma”.

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