'Crónicas' recupera '18 años y 1 día', medalla de bronce en el Festival de Nueva York
- El reportaje se acerca a la realidad de los menores extranjeros no acompañados en España
- Miércoles 22 de abril, a las 23:45 en La 2
‘Crónicas emite esta noche ‘18 años y un día’, un trabajo de producción propia que acaba de ser reconocido en el Festival Internacional de Cine y TV de Nueva York con la medalla de bronce en la categoría de Documental. Muestra cómo los jóvenes tutelados por el Estado tienen que abandonar los centros de menores al cumplir la mayoría de edad. El sistema de protección les dice adiós y salen, en muchas ocasiones, sin tener dónde ir a dormir. En la calle, y a falta de una red familiar, pasan a formar parte del colectivo de personas sin hogar
Detrás del término MENA (menor extranjero no acompañado) hay miles de niños, sobre todo magrebíes y subsaharianos, que se juegan la vida para llegar a España en patera o en los bajos de un camión. Viven en los centros de menores hasta su 18º cumpleaños y después se quedan en la calle.
Uno de estos jóvenes en la calle, su nuevo hogar RTVE
La situación es aún más grave cuando abandonan los centros, sin que la administración haya cumplido con su obligación legal de tramitarles el permiso de residencia. A partir de ese momento, están en situación irregular convertidos en candidatos a recibir una orden de expulsión.
En la mayor parte de los casos su permiso temporal para quedarse a vivir no les autoriza a trabajar. Y hay chicos que, perdidos en este laberinto, escogen el camino equivocado de las drogas y la delincuencia.
El sistema de protección de menores en las distintas Comunidades Autónomas tiene programas para estos jóvenes ex tutelados, pero son muchos más los candidatos que los recursos.
A Málaga llegan procedentes de Ceuta y Melilla y de distintos puntos de Andalucía, porque saben que en la ciudad existe un dispositivo para personas sin hogar del que forman parte el Ayuntamiento y diez entidades sociales. Se llama Puerta Única y tiene un protocolo específico para ex tutelados que les proporciona, además de techo y comida, un itinerario formativo para que puedan escapar de la exclusión y desarrollar un proyecto de vida autónomo.