Corrupción, delincuencia, ética y humor se dan la mano en 'Cien años de perdón'

• La nueva película de Daniel Calparsoro se estrena este viernes
• Protagonizada por Luis Tosar y Rodrigo de la Serna

Las mañanas de RNE - 'Cien años de perdón', lo último de Daniel Calparsoro

Este viernes se estrena Cien años de perdón, la nueva película de Daniel Calparsoro, protagonizada por el actor español Luis Tosar y el argentino Rodrigo de la Serna.

Con guión de Jorge Guerricaechevarría (Celda 211), la cinta comienza con un atraco a un banco en el que las cosas se complican.

Luis Tosar y Rodrigo de la Serna.

Luis Tosar y Rodrigo de la Serna. rne

"Es una peli de buenos y malos en la que a partir del minuto 10 el espectador empieza a dudar porque nadie es quien parece ser", ha asegurado Luis Tosar en Las mañanas de RNE.

La acción se desarrolla en Valencia porque "Valencia encerraba el secreto del accidente del metro en el que murió tanta gente y que nunca se ha investigado, siempre ha quedado un poco oculto, y llevó a que se paralizara una ampliación de metro que luego se inundó y eso fue inspirador para el plan de fuga de los atracadores", ha explicado el director.

Además, la corrupción es otra protagonista importante. "Hemos hecho política ficción, nos hemos inspirado en algunos casos pero los hemos manipulado, no ha habido nunca intención de reflejar algo real, pero a la luz de los últimos acontecimientos esta ficción se ha convertido en algo más real de lo que pretendíamos", continúa el cineasta, quien ha elegido unos "atracadores de pacotilla" que no caen mal. "Si en una película de atracos los atracadores no caen bien, algo va mal", dice.

"El código de los atracadores tiene mucha más ética que los que están fuera, que los policías, que los políticos que están más podridos, y esto te lleva al dilema de la película: si las personas con mayor ética son atracadores de bancos ¿cómo somos los demás, no? ¿En qué país estamos viviendo?", se pregunta Calparsoro. "Porque además los ladrones saben que si les pillan van a la cárcel, son sinceros, los otros no, los otros encima se indignan cuando los acusan".

La diferencia principal entre esta cinta y las anteriores de Daniel Calparsoro es que "incluye el sentido del humor y la película no se sufre, se disfruta, el espectador sale con una sonrisa, es una cinta que puede decir que este mundo es una puta mierda pero el público se sale con la suya".