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'Por todo lo alto', una deliciosa película concebida como una "sinfonía musical"

  • Una comedia que fue nominada a siete premios César y ganó el premio del público en San Sebastián
  • Tras su éxito en Francia, llega a los cines españoles este 28 de marzo
Dos hombres, uno en uniforme y trombón, otro en esmoquin, pasean por una playa soleada con mar en calma.
Fotograma de 'Por todo lo alto'

Nominada a 7 Premios César del cine francés y ganadora del premio del público del pasado Festival de San Sebastián, Por todo lo alto, de Emmanuel Courcol (Welcome, El triunfo) es una deliciosa comedia que nos enseña a disfrutar de la vida y de la música; y que tiene un reparto inolvidable encabezado por Benjamin Lavernhe (Curiosa) y Pierre Lottin (Cuando cae el otoño), ambos nominados a los César por sus actuaciones. Una película que nos hace reflexionar sobre la vida, la familia y la amistad, pero siempre con una sonrisa. Se estrena en cines este 28 de marzo.

La película nos cuenta la historia de Thibaut (Lavernhe), un famoso y estirado director de orquesta que tiene leucemia. Buscando un donante de médula, descubre que tiene un hermano, Jimmy (Lottin), cuya existencia desconocía. Jimmy trabaja en un comedor escolar y toca el trombón en una banda de música en el norte de Francia. Al detectar las excepcionales habilidades musicales de su hermano, Thibaut se propone reparar la injusticia del destino. Jimmy entonces comienza a soñar con otra vida. Pero no todo será tan fácil...

Preguntamos a Emmanuel Courcol si piensa que ser director de cine y orquesta tiene algo en común: "En cierta forma hay un parentesco, porque ambos deben coordinar a mucha gente, pero es mucho más difícil y tengo más respeto por el oficio de director de orquesta que por el de director de cine. Por eso hago esta comparativa con muchísima modestia".

Irène Muscari, esposa de Courcol, junto al que ha escrito el guion de la película (también nominado a los César), nos comenta cómo surgió la historia: "Se le ocurrió a Emmanuel hace unos años, cuando viajó al norte de Francia para documentarse sobre un guion que estaba escribiendo. Y allí descubrió el mundo de las fanfarrias, de las bandas de música popular... y fue algo que le asombró. Sobre todo su enorme creatividad y cómo la música era para ellos una forma de vida".

"Entonces -añade la guionista-, se preguntó cómo sería el encuentro de esos dos mundos totalmente diferentes, el de una orquesta de música clásica de prestigio internacional y el de la banda de un pueblo. Un día empezamos a hablar sobre ello y así surgieron los dos hermanos que representan a esos dos mundos, esas dos músicas diferentes. nos apasionamos con la idea y a los pocos días ya estábamos escribiendo el primer borrador".

Orquesta tocando en sala de conciertos con paredes rojas. Director con barba y pelo corto dirige a los músicos con instrumentos de cuerda. Fotograma de película.

Fotograma de 'Por todo lo alto'

Dos formas muy distintas de vivir la música

El director destaca que esos dos hermanos protagonistas representan: "Dos formas muy distintas de ver la música: en el caso de Thibault lo que prima es la búsqueda de la excelencia, mientras que en el de Jimmy de lo que se trata es de la búsqueda del placer de vivir la música juntos, de tocar juntos. Digamos que el lazo social es tan importante como el resultado musical en la fanfarria. Pero al final, los dos hermanos nos transmiten lo mismo, el amor por la música".

Las relaciones fraternales son un tema recurrente en la filmografía de Emmanuel: "Si, yo tengo hermanos y es verdad que para mí los lazos fraternales son muy importantes. Es como un terreno conocido en el que me encuentro muy a gusto. Pero en este caso concreto, lo que me interesaba era ver cómo se construía ese lazo fraternal entre dos personas de dos clases sociales y con dos destinos tan diferentes. Ambos se esfuerzan en construir esos lazos, esa unión que debería haber sido pero nunca fue, y lo hacen a través de la música. Algo que no es fácil, porque tienen una relación complicada que está llena de sentimientos contradictorios: la admiración, el afecto... pero también los celos, la envidia, la culpabilidad... todo está ahí. Y en la escena final veremos el climax de esa relación, si realmente logran ser hermanos de verdad".

Primer plano de dos músicos con uniformes de banda: camisas blancas, corbatas doradas y chaquetas oscuras con detalles dorados. Fondo con más músicos.

Fotograma de 'Por todo lo alto'

"Intentamos retratar la vida"

La película es un mecanismo de relojería perfectamente engrasado que mezcla drama, comedia y crítica social. Pero... ¿Cuál es el secreto para conseguir todo eso y que, a la vez, sea una película tan emotiva y divertida? "Para nosotros lo más importante era reflejar la vida tal y como es, pero también cómo podría llegar a ser. Porque la vida siempre nos sorprende. La vida es un drama, una comedia, un juego, una historia de amor... Hay de todo. Y nosotros lo que hacemos es fijarnos en la gente, en hombres y mujeres de toda clase y condición. Y así descubrimos lo que la vida puede aportar. Y luego fantaseamos sobre como nosotros, nuestros amigos... podríamos tener otras vidas diferentes, jugar con otros destinos posibles. La vida real es nuestra inspiración para crear historias novelescas con algo de cómico y dramático a la vez".

Lo que no ha sido tan fácil es retratar a un director de orquesta: "Teníamos que conocer muy bien cómo era un director de orquesta y su forma de vida -asegura Emmanuel-, porque para llegar a un nivel así en ese mundo tan cerrado, tan competitivo, tienes que hacer muchísimos sacrificios. Hemos conocido a muchos de ellos y, de hecho, Benjamin Lavernhe, fue "dirigido por uno de ellos" durante meses, para que pudiera encarnar el papel de forma convincente.

Escena informal de dos hombres conversando en una habitación con pared de ladrillo y pizarra verde con anotaciones musicales.

Fotograma de 'Por todo lo alto'

"La película sigue el ritmo de una sinfonía"

Preguntamos a Irène si cree que el guion de una película tiene algo que ver con una partitura: "Para nosotros el guion de la película es un partitura, sigue el ritmo de una sinfonía. Arrancamos con la obertura, luego el Allegro, el Adagio, el Andante... hasta la apoteosis final. Nuestra película casi se puede "escuchar", somos muy melómanos y es algo que llevamos dentro".

"La interpretación de los actores -añade Emmanuel-, da vida a esa partitura. En el rodaje ellos aportan cosas personales, literalmente interpretan el guion y muchas veces lo mejoran. Curiosamente no lo había pensado nunca con este símil musical, pero ahora lo veo así. Creo que la vida, como espero que pase con esta película, siempre te sorprende".

Por todo lo alto es una película sorprendente y, sobre todo, llena de vida, que llegará a los cines este 28 de marzo.

Cartel de la película

Cartel de 'Por todo lo alto'