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Zelaya pide por carta a la comunidad internacional que no reconozca las elecciones en Honduras

  • El presidente depuesto DICE que los comicios del 29 de noviembre serán anulados
  • Pide cooperación al resto de América Latina, a la OEA, la ONU y la UE
  • Critica a Estados Unidos por dar validez a los comicios
  • Si se mantiene el calendario, su restitución se decidirá el 2 de diciembre

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Zelaya, en una imagen reciente en el interior de la embajada de Brasil en Tegucigalpa.
Zelaya, en una imagen reciente en el interior de la embajada de Brasil en Tegucigalpa.

El depuesto presidente de Honduras, Manuel Zelaya, ha pedido a los presidentes de América, a la OEA, a las Naciones Unidas y a la Unión Europea, que no reconozcan las elecciones del 29 de noviembre en su país mientras EE.UU. insiste en que esperará a saber si los comicios cumplen con los estándares internacionales para darles validez o no.

"En estos momentos tan difíciles a los hermanos países de América, solicitamos su solidaridad con Honduras: Que nos acompañen en base a los hechos por ustedes conocidos, revalidando la posición de no apoyar el intento unilateral de dar validez a un acuerdo rescindido en tiempo y forma por las violaciones consumadas por la dictadura", subraya una carta de Zelaya distribuida a la prensa.

"Estas elecciones tendrán que ser anuladas y reprogramadas donde se respete la voluntad del soberano", expresa la misiva firmada por Zelaya desde la Embajada de Brasil en Tegucigalpa, donde permanece desde el 21 de septiembre pasado, señala la carta dirigida a los presidentes de América, la Organización de Estados Americanos (OEA), las Naciones Unidas y la Unión Europea.

Restitución retrasada

La mayor parte de la comunidad internacional ha reiterado que no reconoce el proceso electoral en marcha, ni al régimen de facto que preside Roberto Micheletti desde el 28 junio desde que Zelaya fue derrocado.

Zelaya exige su restitución en el poder, lo que no será posible, al menos antes del 2 de diciembre, fecha en que el Parlamento de su país conocerá sobre su regreso o no al poder, según informó hace dos semanas el presidente de ese poder del Estado, José Alfredo Saavedra.

"Invoco a su cooperación para que no quede impune este Golpe de Estado Militar y sus sangrientas violaciones a los derechos humanos", añade la carta.

El derrocado presidente también ha pedido la cooperación internacional "para que no quede impune este golpe de Estado militar y sus sangrientas violaciones a los derechos humanos".

Críticas a Estados Unidos

"De la manera más atenta, invitamos a todas las naciones que reconocen nuestro gobierno, que se abstengan de apoyar las acciones del régimen ilegal que usurpó el poder por la fuerza de las armas", dice Zelaya en su mensaje.

En su carta también ha vuelto a criticar a Estados Unidos, porque "con su postura final", de apoyar las elecciones del 29 de noviembre, "ha debilitado el proceso de revertir el golpe de Estado, mostrando la división en la comunidad internacional".

"Legitimar los golpes de Estado por medio de procesos electorales espurios divide y no contribuye a la unidad de las naciones de América", agrega su mensaje.

Por su parte, el Gobierno de Estados Unidos ha urgido a las partes a formar de manera "expedita" un gobierno de unidad nacional en Honduras y ha insistido en que esperará a comprobar si las elecciones del próximo domingo cumplen los estándares internacionales.

En una sesión privada de la Organización de Estados Americanos (OEA) dedicada a la crisis hondureña ante los comicios, el secretario de Estado adjunto para Latinoamérica, Arturo Valenzuela, ha recalcado que la decisión de dejar temporalmente el poder del presidente de facto, Roberto Micheletti, ha abierto un "espacio para el compromiso" en Honduras.

Micheletti anunció el jueves pasado que pretende ausentarse del ejercicio de sus funciones como presidente de facto por un período que podría comenzar el 25 de noviembre y concluir el 2 de diciembre, día que el Congreso prevé votar sobre la restitución del depuesto mandatario, Manuel Zelaya, para facilitar un periodo de "reflexión" ante las elecciones.

Sin embargo, para Zelaya esa solución sigue siendo insuficiente. "Como presidente de Honduras, les comunico que, bajo estas condiciones, no respaldaré el proceso electoral y procederé a impugnarlo legalmente", concluye en su misiva.