ERC niega su apoyo a Bono y no descarta formar un grupo propio en el Congreso

 

 

A pesar de haber menguado su presencia parlamentaria tras las elecciones del 9 de marzo, pasando de ocho a tres diputados, Esquerra Republicana de Cataluña ha querido marcar su territorio en la ronda de negociaciones con el PSOE para la formación de las mesas del Congreso y el Senado.

 

El portavoz de ERC en el Congreso, Joan Ridao, ha negado en su reunión con el secretario de organización del PSOE, José Blanco, su apoyo a la candidatura de José Bono para presidir la Cámara Baja; también ha expuesto sus condiciones de cara a la investidura del presidente José Luis Rodríguez Zapatero y ha afirmado que no cierra la puerta a posibles alianzas que permitan formar un grupo propio fuera del Grupo Mixto.

 

Así se ha expresado Ridao al término un encuentro "cordial" de unos 45 minutos de duración, en los que si algo ha quedado claro es que los republicanos no darán su voto a favor de la candidatura de Bono a la Presidencia del Congreso.

 

Según ha explicado el portavoz independentista, no puede tener su apoyo "alguien que ha arremetido contra el Estatut o que mantiene la misma afición política que el PP, pero desde el PSOE, o alguien que durante la campaña electoral ha insistido en que desaparezca del mapa político lo que representa ERC".

 

Respecto a la composición de los grupos parlamentarios, Ridao ha admitido haber mantenido contactos con "todas las fuerzas políticas" del grupo mixto, "sin excepción", por lo que no descarta pactar alianzas para llegar a formar grupo propio en esta nueva etapa.

 

Según ha comentado, la idea sería sumar fuerzas para lograr constituir un grupo parlamentario de "carácter eminentemente técnico que permita ganar, no sólo visibilidad política, sino recursos, medios materiales y económicos" para mejorar su trabajo.

 

Posible alianza con IU-ICV y Na-Bai

 

Para ilustrar esta posibilidad, ha puesto como ejemplo el escenario abierto tanteado por ERC para formar un grupo con IU-ICV y Na-Bai que cumpliría con el reglamento del Congreso, pero ha insistido en que no descarta otras fórmulas que podrían exigir una mayor flexibilidad de la norma que rige la Cámara Baja.

 

En este sentido, ha recordado que también "depende del resto de fuerzas políticas" componer un grupo parlamentario propio mediante alianzas, aunque no adelantó el contenido de las respuestas obtenidas hasta ahora por parte de otras formaciones como Na-Bai.

 

En cualquier caso, aclaró que "hoy por hoy" la formación republicana se sitúa en el grupo mixto y es consciente de que, a pesar de ser "la quinta fuerza de la Cámara Baja, tiene tres diputados".

 

"De entrada", no a la investidura

 

De paso, también se ha tratado en la reunión con José Blanco las condiciones que ERC ve necesarias para dar apoyo a Zapatero en su próxima investidura, como hizo la formación catalana en 2004.

 

Ridao ha pedido en primer término que se publiquen las balanzas fiscales, con el objetivo de dar "transparencia" al debate de financiación autonómica, que, en lo que se refiere a Catalunya, quiere que responda a un modelo que reduzca al menos en un tercio el déficit fiscal en los próximos cuatro años.

 

Asimismo, ha reclamado a Blanco "más y mejores infraestructuras", además de un "mayor gasto social" en España, así como "culminar la transición democrática" reabriendo el debate de la Memoria Histórica y consagrando la "plena unidad lingüística", pretendiendo que el catalán esté presente en las instituciones del Estado.

 

Sin embargo, aseguró que, "de entrada", los independentistas catalanes son "escépticos" ante la candidatura de Zapatero ya que se sienten "engañados" por la "ejecutoria del PSOE en los últimos tiempos", que según ha dicho, "se ha caracterizado por promesas incumplidas y miedo al qué dirán", en referencia al Estatut de Cataluña.