La conexión argentina del Atlético Giuliano-Almada acaba con la resistencia 'rojilla' en el Metropolitano
- El Atlético de Madrid se impone por la mínima a Osasuna con un tanto de Almada (1-0)
- El equipo robjiblanco sufrió una estricta anulación de un gol de Baena
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El Atlético ha tenido que trabajar, y mucho, para derrotar a Osasuna en el Metropolitano y sumar tres nuevos puntos en Liga. Lo hizo con un gol de Almada que acabó con la resistencia del equipo visitante, que tuvo en Sergio Herrera un muro bajo palos con ocho paradas.
Tardó 68 minutos en anotar el tanto de la victoria un Atlético que pudo haber encarrilado el partido mucho antes, cuando tras apenas diez minutos de juego Baena anotó el que iba a ser su primer gol como rojiblanco... hasta que el colegiado decidió anularlo tras su revisión en el VAR en una decisión muy rigurosa. La posición antirreglamentaria de Griezmann obstaculizando el paso de Boyomo fue considerada suficiente para anular el gol, para enfado mayúsculo de Diego Pablo Simeone.
Fue la jugada más destacada de una animada primera parte, en la que el Atlético conectó a la perfección sus hombres ofensivos, generando un puñado de ocasiones entre Baena, Julián Álvarez, Barrios y Griezmann. Mientras, Osasuna, que se se fue de Madrid tal y como llegó, como el peor visitante de Primera, lo intentó por medio del exmadridista Víctor Muñoz, muy activo en el inicio del choque.
Gol 'albiceleste'
Pero tanto Herrera como Oblak se erigieron protagonistas, evitando que el marcador se moviera en ambas porterías. Brillantes de principio a fin, evitaron goles cantados como un pie providencial de Herrera a disparo de la 'Araña' Álvarez tras un pase perfecto del mejor Marcos Llorente. Fue el primer aviso del aluvión rojiblanco que acabó derivando en el gol de la victoria local, nacido de dos jugadores de refresco rojiblancos: Giuliano Simeone y Thiago Almada. El primero se marchó por velocidad en la banda derecha de Bretones y dejó el tanto en bandeja a Almada, que estrenó su casillero goleador como jugador del Atlético.
El trabajo tuvo su recompensa para un Atlético que, sin embargo, contuvo el aliento cuando Budimir remató a bocajarro en el 89', pero ahí apareció Oblak para meter un pie inverosímil que mantuvo a su equipo en pie.
