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Más allá del fútbol, el papa Francisco también era un gran fan de la música. Artistas como Aretha Franklin o Patti Smith cantaron en eventos del Vaticano por petición expresa del Santo Padre. Además, numerosas estrellas del pop y del rock se reunieron con él en la Santa Sede.

Hace siete meses, el papa Francisco fue recibido con este entusiasmo en Singapur. Su visita al continente asiático fue el más largo de su pontificado, con 11 días de estancia en el Sudeste Asiático y Oceanía. La región, pese a los obstáculos culturales y políticos, es donde más crece el número de católicos. En China, el papa aceptó obispos nombrados por el partido comunista, con el que ha tendido puentes. Actualmente, más de 150 millones de católicos son asiáticos.

La otra gran esperanza es el África Subsahariana, frecuentada también en sus viajes apostólicos. Uno de cada cinco católicos del mundo es africano. Un aumento sostenido que se nota especialmente en las vocaciones de sacerdotes.

En cambio, en América Latina, antiguo pulmón católico, el crecimiento se ha estancado. Avanzan los cristianos evangelistas en el continente, siendo Brasil su principal foco. En el resto del mundo occidental, el descenso de bautismos y vocaciones es cada vez más palpable. En Europa, algunos expertos creen que harían falta dos generaciones para volver a ver crecimiento. Actualmente, hay en el mundo 1.400 millones de fieles católicos, aproximadamente una quinta parte de la población mundial.

Cristóbal López, arzobispo de Rabat, es uno de los nombres que suenan para suceder al papa Francisco. El religioso ha recordado que "hay ciertas cosas que el papa Francisco ha iniciado y que no deberían perderse". "Sería interesante que [el futuro papa] sea una persona que se comprometa a dar continuidad y a dar impulsión a esas intuiciones que Francisco ha puesto sobre la mesa". El arzobispo ha señalado que "se necesita una voz profética que diga que no queremos iniciar una carrera armamentística". "Cuando los países se habían comprometido a reducir el armamento, resulta que volvemos atrás", ha lamentado.

Francisco siempre defendió la "Iglesia de las periferias". Utilizaba esa expresión para destacar el trabajo de los católicos en lugares lejanos y pobres, alejados de la jerarquía, y eso se refleja en la Villa 21, un barrio a las afueras de Buenos Aires. Allí hay una pequeña parroquia en la que muchos de sus fieles conocieron al entonces padre Bergoglio.

Hugo, que toca en el coro, vino de Paraguay hace ya unas cuantas décadas. Le acompañamos a su casa para que nos enseñe el álbum familiar, donde guarda como un tesoro el momento en que Francisco le confirmó. Asegura que el papa era callado, simpático y muy humilde.

Foto: Tomas Cuesta/Getty Images

Austen Ivereigh, biógrafo del papa Francisco, ha hablado con TVE en Roma. El autor de los libros "El gran reformador" y "Pastor herido" recuerda al papa como "una persona excepcional".

Empezaron a trabajar juntos cuando Ivereigh le propuso hacer un libro que abordase el "cómo podíamos salir mejor de la pandemia". A partir de ese momento se empezó a tejer una "relación tierna", según la describe el escritor.

Uno de los mayores recuerdos que Ivereigh tiene del pontífice es "su empeño misionero en todos los contextos". La última vez que lo visitó en Roma "tenía una bronquitis fuerte", recuerda. "Al irme de su apartamento, tuve la sensación de que iba a ser la última vez que le iba a ver". Ahora se despide de él en el Vaticano.

Desde el inicio de la mañana, numerosos religiosos se han despedido del papa Francisco en la plaza de Santa Marta. En el interior de la capilla, los cardenales han acompañado al cuerpo del pontífice hasta el inicio de su traslado a San Pedro. A continuación, han entrado los "sediarios", laicos romanos que se encargan desde hace siglos de esta tarea. Primero, han usado ruedas y, después, han cargado el féretro a hombros. Los fieles han estallado en aplausos al paso de la comitiva. Ya en la basílica, han depositado el cuerpo ante el altar de confesión, en el suelo.

Raúl Berzosa es un pintor español que recibió un e-mail del Vaticano para un proyecto sobre el papa Francisco: "La sorpresa fue bastante grande. Que se pongan en contacto contigo desde el Vaticano... Aunque sea para pedirte imágenes, no encargos, eso es que te tienen echado el ojo", señala. En 2013, justo cuando Francisco se convirtió en papa, le pidieron fotos de su fresco de Santa Teresa de Jesús, que se encuentra en la Iglesia del Santo Ángel, ubicada en Sevilla. En 2016, le llegó su primer encargo: hacer un retrato del papa Francisco. La obra, titulada Francisco, se creó para la casa sacerdotal San Juan de Ávila, en Almería.

El papa Francisco ha dejado para siempre la Casa de Santa Marta en la que ha vivido estos doce años en el Vaticano. A primera hora de este miércoles entraba en la plaza de San Pedro que se ha ido llenando poco a poco. Ya en la Basílica su cuerpo ha sido depositado a ras de suelo. Nada que ver con la ceremonia seguida durante las exequias de los últimos papas, bastante más compleja y difícil de entender para los ciudadanos contemporáneos.

Cientos de religiosos, diplomáticos y curiosos se han despedido este miércoles del papa Francisco en una misa de réquiem en la basílica del Santo Sepulcro, localizada en la Ciudad Vieja de Jerusalén. Según ha informado la actual corresponsal de RTVE en Jerusalén, Almudena Ariza, allí han acudido a rendir tributo no solo los cristianos católicos de Tierra Santa, sino también ortodoxos y protestantes. El papa, incluso dos días antes de su muerte, mantuvo el hábito de llamar a la única parroquia católica que existe en la Franja de Gaza, la Sagrada Familia, a fin de hablar con hermanas religiosas y el vicario, a quienes preguntaba por los niños de Gaza y sobre si tenían suficiente comida.

El féretro del Papa Francisco, fallecido este lunes a los 88 años, ya se encuentra en la Basílica Papal de San Pedro en el Vaticano para ser velado durante tres días, tras ser trasladado este miércoles desde la capilla de la residencia de Santa Marta. Pasadas las 9.00 horas, los cardenales salían de la capilla y, seguidamente, se iniciaba el traslado del féretro. Con el sonido de las campanas doblando y entonando diferentes salmos, ha comenzado la procesión con los restos mortales del pontífice. Desde el Arco de las Campanas ha salido a la Plaza de San Pedro a hombros, descubierto y acompañado por miembros de la Guardia Vaticana, para después entrar en la basílica por la puerta central.

Durante el recorrido por la Plaza de San Pedro se han podido escuchar aplausos que salían de entre los fieles congregados para despedir al papa. El sencillo féretro de madera de Francisco se ha ubicado a nivel casi del suelo, sobre una pequeña plataforma, en el altar de la Confesión, y ha sido bendecido con agua bendita. El cardenal camarlengo, Kevin Joseph Farrell, ha presidido la Liturgia de la Palabra. A las 11:00 horas se ha abierto la capilla ardiente para que sea visitada por los fieles.

FOTO: EFE/ Mario Tomassetti/dicasterio

Los miles de fieles que desde horas esperaban la apertura de la basílica de San Pedro para dar su último adiós al papa Francisco han comenzado a entrar a las 11.00 horas de manera ordenada para poder detenerse algunos instantes ante el féretro. La basílica permanecerá abierta este miércoles hasta la medianoche y mañana volverá a abrir a las 7.00 horas. El viernes permanecerá abierta hasta a las 19.00 horas, cuando se cerrará para comenzar el rito del cierre del féretro.

El ataúd con los restos mortales de Francisco ha recorrido en una procesión la plaza de Santa Marta, la plaza de los Protomártires Romanos, atravesando el Arco de las Campanas hasta salir a la plaza de San Pedro para entrar en la basílica por la puerta central. El féretro ha estado precedido por los cardenales presentes en Roma, mientras que la han cerrado las personas que más cerca estuvieron del pontífice, sus secretarios y sus asistentes.

Por expresa petición de Francisco, su cuerpo será enterrado en Santa María la Mayor, no en la Basílica de San Pedro. Cinco días después de su muerte, los representantes de al menos 162 países se darán cita en la Basílica de San Pedro para despedir al papa Francisco en una misa cargada de simbolismo y ritos litúrgicos católicos.