PSOE, Unidos Podemos y Ciudadanos han acordado que Luis Bárcenas sea el primero en comparecer en la comisión que investiga la supuesta financiación ilegal del PP y que le sigan los demás tesoreros. También han decidido que no haya límites temporales a la investigación tal y como pedía el PP. Los 'populares' advierten que recurrirán al Constitucional.
La diputada del PP por Cataluña y secretaria primera de la Mesa del Congreso, Alicia Sánchez Camacho, ha criticado al presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, por querer acudir únicamente a la Cámara Baja si previamente hay un acuerdo para celebrar el referéndum.
"Acudir al Congreso a explicarse con un acuerdo previo es como jugar un partido habiendo acordado el resultado", ha asegurado en una entrevista en Los Desayunos de TVE.
La diputada 'popular' ha defendido que acuda al Congreso pero para solicitar la celebración del referéndum, pero no imponiéndolo. "Diálogo no es decir: voy a hacer el referéndum. Eso es imposición unilateral", ha advertido.
Por otro lado, ha rechazado las acusaciones de la Generalitat de que el Gobierno de España esté judicializando todo el tema catalán. "Si quieren actuar de manera ilegal y si incumplen la ley, tendrá una respuesta jurídica. Pero eso no es judicializar el asunto", ha advertido.
Cristina Cifuentes ha negado haber influido en el informe que recomendaba adjudicar la cafetería de la Asamblea a Arturo Fernández, ni haber modificado -ni siquiera redactado- el pliego del contrato, y ha pedido que puedan comparecer los técnicos que elaboraron esos documentos para que digan si alguien condicionó sus informes. Durante su comparecencia ante la comisión de investigación sobre corrupción política en la Comunidad que trata la adjudicación del contrato de cafetería de la Cámara al Grupo Cantoblanco en su etapa como vicepresidenta de la Cámara, en el marco de la trama Púnica y la pieza sobre financiación ilegal del PP de Madrid, Cifuentes ha criticado a los grupos de oposición por no permitir que declaren en esta comisión los técnicos que intervinieron en las adjudicaciones.
El presidente de la Oficina del Cargo Popular, Manuel Cobo, no ve razones para que dimita el fiscal jefe anticorrupción tras haber reconocido tener el 25% de una sociedad con sede en el paraíso fiscal de Panamá. En su opinión, Manuel Moix sería sospechoso si la sociedad tuviese actividad, pero al estar parada y ser resultado de una herencia, añade, no hay razones para pedir su dimisión.
En cuanto a la comparecencia de Mariano Rajoy en el juicio de la trama Gürtel, subraya que acude como testigo y dice no entender que no le hayan dejado declarar por videoconferencia. "Careces, cuando no vas, del sentido del olfato, no sé si les interesa mucho, el tacto, no sé si querían también, y son sentidos que no tienen, creo yo, mucho que ver con la declaración de un testigo, el que no puedas olerle, pero le puedes oír, le puedes preguntar de la misma manera. Forma parte del espectáculo el que haya gente que esté muy satisfecha, muy orgullosa de que comparezca personalmente, y yo igual que Rajoy: lo que digan los tribunales", explica.
El presidente de la Oficina del Cargo Popular, Manuel Cobo, no ve razones para que dimita el fiscal jefe anticorrupción tras haber reconocido tener el 25% de una sociedad con sede en el paraíso fiscal de Panamá. En su opinión, Manuel Moix sería sospechoso si la sociedad tuviese actividad, pero al estar parada y ser resultado de una herencia, añade, no hay razones para pedir su dimisión.
En cuanto a la comparecencia de Mariano Rajoy en el juicio de la trama Gürtel, subraya que acude como testigo y dice no entender que no le hayan dejado declarar por videoconferencia. "Careces, cuando no vas, del sentido del olfato, no sé si les interesa mucho, el tacto, no sé si querían también, y son sentidos que no tienen, creo yo, mucho que ver con la declaración de un testigo, el que no puedas olerle, pero le puedes oír, le puedes preguntar de la misma manera. Forma parte del espectáculo el que haya gente que esté muy satisfecha, muy orgullosa de que comparezca personalmente, y yo igual que Rajoy: lo que digan los tribunales", explica.
Rajoy está satisfecho con la llamada de Sánchez, ya que, a pesar de sus diferencias, confíaba en el compromiso del PSOE con la unidad de España. El presidente prioriza la defensa de los principios fundamentales a otros movimientos y por ahora no piensa convocar a las fuerzas constitucionalistas. Finalizada la Cumbre hispano lusa, el presidente del Gobierno regresa a Madrid para firmar el acuerdo con Nueva Canarias que le garantiza la aprobación de los presupuestos.
