El día de la Lotería de Navidad será muy distinto este 2020 debido a la pandemia. No habrá público en el Teatro Real y todos los que suban al escenario, niños incluidos, tendrán que haber pasado un test de antígenos.
En el Telediario se han desplazado a varios puntos de España para contar cómo se preparan para el 22 de diciembre algunas personas.
Los tradicionales bombos, la tolva, la trompeta o las bolas del Sorteo Extraordinario de la Lotería de Navidad 2020 han llegado este martes al Teatro Real de Madrid. Todos los materiales han accedido al escenario del coliseo madrileño bajo un estricto protocolo de seguridad sanitaria, consistente, entre otros, en la desinfección anti-covid tanto de los elementos que intervienen en el sorteo, como de los camiones que los han transportado.
Cuando solo queda una semana para el sorteo de la Lotería de Navidad, hemos conocido una historia con final feliz. Un lotero ambulante perdió casi un centenar de décimos de la Lotería Nacional, la mayoría del sorteo de Navidad, y el joven que los encontró no dudó en buscarle para devolvérselos. El joven de 27 años dejó al lotero una nota en el vehículo donde los encontró y avisó a la policía. En caso de que toque se llevará un pellizco porque el afortunado dueño le regaló uno de los décimos que ha recuperado.
Tras un año complicado empieza la cuenta atrás de dos semanas para escuchar a los niños de San Ildefonso cantar los números de la lotería de Navidad.
Josep Manuel Iborra, presidente de ANAPAL, la Agrupación Nacional de Asociaciones de Lotería, ha dicho en Las mañanas de RNE con Íñigo Alfonso que la venta se ha recuperado un poco en ventanilla, pero que la pérdida en las primeras semanas ha sido del 20%.
Hemos comprado menos porque hemos viajado menos. "En la campaña de verano no ha habido reservas de colectivos que utilizan la lotería de Navidad para financiarse. Este tipo de venta es un 40% y ha descendido de forma alarmante", explica.
A pesar de que las ventas a través de Internet han aumentado bastante, no compensan las pérdidas en ventanilla o colectivos. "El 30% de las administraciones de lotería están en riesgo de seguir trabajando", concluye.