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En México han liberado tras cumplir condena y para su deportación a Estados Unidos al llamado "El Ponchis", un niño sicario condenado por asesinar a 4 personas y secuestrar a otras 3. No es el único menor que cae en manos de los cárteles de la droga y es adiestrado para delinquir, pero su caso fue el primero documentado en México.

Los 16 consejeros de Repsol han aprobado al preacuerdo según el cual Argentina indemnizaría a la petrolera española con 3.700 millones de euros en bonos de deuda de ese país. Sería la compensación por nacionalizar, hace un año y medio, el 51% de YPF en manos de Repsol. La decisión ha sido unánime pero el presidente de CaixaBank, Isidro Fainé, no ha asistido y ha delegado su voto en Antonio Brufau.

El consejo de administración de Repsol decide en su reunión de este miércoles sobre el principio de acuerdo alcanzado entre los gobiernos español y argentino en la compensación que pagará Argentina por la expropiación de YPF. Aunque no han trascendido los detalles, el acuerdo fijaría el pago de unos 5.000 millones de dólares (cerca de 3.800 millones de euros) en deuda soberana argentina canjeable por efectivo en el mercado, menos de la mitad de los 10.500 millones de dólares (unos 7.700 millones de euros) reclamados por Repsol, así como el cierre de todos los litigios judiciales abiertos.

Sería la compensación por nacionalizar el 51% de las acciones de YPF en manos de la petrolera española. Los pagarían con bonos de deuda argentina, canjeables por dinero en los mercados internacionales. El preacuerdo se cerró en Buenos Aires en una reunión entre los gobiernos argentino y español y representantes de YPF y de Repsol. Sin su presidente, Antonio Brufau, pero con sus principales accionistas, entre ellos, la mexicana Pemex.

Los inversores han premiado a Repsol y a sus principales propietarios por el pacto sobre YPF. El consejo de administración de Repsol se pronuncirá este miércoles sobre los términos y condiciones de dicho preacuerdo sobre YPF, que incluye una posible compensación de 5.000 millones de dólares (3.700 millones de euros) y la posibilidad de que esa cantidad sea pagada, en parte, en bonos argentinos.

La expropiación a Repsol de YPF se planteó en Argentina como una cuestión de orgullo nacional. Y la presidenta Cristina Fernández de Kirchner lo avisó dos meses antes de expropiarla: "el subsuelo es de los argentinos, y está concesionado, y por tanto no podemos volver a la época del virreinato, que se llevaba todo el oro y la plata y no dejaba nada". En abril de 2012, Argentina expropió el 51% de las acciones que Repsol tenía en YPF, la gran empresa nacional. Las autoridades reclamaban a Repsol que produjera más, que reinvirtiera más, porque pese a sus grandes reservas de crudo y gas, Argentina había dejado de ser autosuficiente. Y eso que se acababa de encontrar un megayacimiento de petróleo no convencional en Vaca Muerta. La prensa local caldeó y anticipó la expropiación y España reaccionó de urgencia. El ministro de Industria, José Manuel Soria, lo consideró un acto hostil, "el gobierno lo interpreta como hostilidad a España y al Gobierno de España" dijo. Pero la expropiación se consumó y empezó un largo tira y afloja para negociar las compensaciones a Repsol. El presidente de la petrolera cifró la indemnización en 18.000 millones, "vamos a pedir 18.000 millones de dólares, vamos a pedir 18.000 y más, si puede ser". Se presionó desde todas los instancias posibles. España decretó la reducción de compras de biodiésel argentino y la Eurocámara propuso suspender los beneficios arancelarios para ese país. Repsol también anunció demandas contra las petroleras que intentaron ocupar su hueco, por el camino, el propio Repsol tuvo problemas con su nuevo accionista, la mexicana Pemex, que ha criticado, y mucho, a la dirección de compañia española por su gestión en YPF. Empresas americanas y francesas, pero sobre todo chinas, se han interesado por el petróleo argentino. Un petróleo que al volver a manos nacionales, fue festejado con entusiasmo futbolístico.

El Tribunal Supremo Electoral (TSE) de Honduras ha dicho que es "irreversible" el triunfo del candidato oficialista a la Presidencia del país, Juan Orlando Hernández, escrutado el 67 % de los votos.

El quinto boletín de resultados parciales divulgado este lunes por el Tribunal, en base al 67 % del escrutinio, mantiene a Hernández, del Partido Nacional, en el primer lugar con el 34,08 % de los votos, seguido de Xiomara Castro, candidata del partido Libertad y Refundación (Libre, de izquierda), con el 28,92 %.

Aunque el ente electoral aún no ha declarado oficialmente un vencedor, el titular del TSE, David Matamoros, ha asegurado en una cadena nacional de radio y televisión que los resultados divulgados hasta ahora "reflejan una tendencia que es irreversible".

Ha matizado: "No declaramos ganador ni perdedor, pero sí determinamos que con estas cifras los resultados definitivos van a ser iguales".

Los dos candidatos favoritos a ganar la presidencia de Honduras se autoproclamaron vencedores de los comicios celebrados el domingo, marcados por una alta concurrencia y cuyos resultados oficiales preliminares, tildados de fraudulentos por un sector de la oposición, dan el triunfo al aspirante oficialista. Los autoproclamados ganadores de la contienda son Xiomara Castro, esposa del derrocado Manuel Zelaya y abanderada del partido de izquierda Libertad y Refundación, y Juan Orlando Hernández, del conservador Partido Nacional.