Boris Johnson tendrá que enfrentarse a una nueva polémica. A su lista de escándalos sobre las fiestas y reuniones sociales en la sede del Ejecutivo durante el confinamiento por la COVID-19, el primer ministro británico debe sumar la acusación de haber autorizado la evacuación de Afganistán de unos 150 perros y gatos de la ONG Nowzad, en detrimento de muchas personas que tuvieron que quedarse en país asiático y que sí eran objetivo de los talibanes.
FOTO:AFP PHOTO / Jessica Taylor /UK Parliament"