No ocupa titulares, ni portadas de los periódicos pero la peor tragedia humanitaria que hay ahora en el mundo está en Sudán. Más de 13 millones de personas han tenido que huir de sus casas; la mayoría son mujeres que tratan de escapar de una guerra civil sangrienta que incluye la violencia sexual como arma de guerra. Es uno de los temas de esta noche en Informe Semanal.
FOTO: REUTERS/Zohra Bensemra/File Photo
La guerra civil en Sudán ha obligado a más de 800.000 personas, en su mayoría mujeres y niños, a huir al país vecino de Chad, donde sobreviven en condiciones extremas en 21 campos de refugiados. En Metche, una pequeña zona cerca de la frontera con Sudán, apenas reciben 5 litros de agua al día, muy por debajo del mínimo vital.
La Unión Europea ha incrementado la ayuda para los desplazados sudaneses a 74,5 millones de euros, pero la salida de Estados Unidos como principal donante ha dejado un vacío crítico para este tipo de casos. La ONU ya ha advertido que los fondos para asistencia apenas cubren necesidades hasta octubre, y teme que la crisis desate un nuevo conflicto regional.
Foto: CAITLIN KELLY/AP
El presidente de transición y líder de la junta militar de Chad, general Mahamat Idriss Déby Itno, ha ganado las elecciones presidenciales del pasado lunes, según los resultados provisionales publicados por la Agencia Nacional de Gestión Electoral (ANGE), con un 61% de los votos frente al 18,5%del segundo.
Unos resultados que se esperaban para el 21 de mayo, pero que se han adelantado después de que su rival, el primer ministro Succès Marsa, se autoproclamara vencedor. Ahora, el líder opositor ha calificado las elecciones de fraude y pide a sus seguidores que salgan a la calle a protestar.
Los observadores internacionales han denunciado numerosas deficiencias electorales durante todo el proceso electoral por parte de ambos candidatos.
Los resultados oficiales de las elecciones en Chad no se conocerán hasta dentro de unas semanas. Desde la oposición arrojan sombras sobre el proceso. Analizamos cómo han sido los comicios con Enrica Picco, directora de Crisis Group para África.
Sudán cumple nueve meses de guerra sumida en la catástrofe. Las Naciones Unidas no han parado de pedir a gritos más atención ante lo que dicen es la mayor crisis humanitaria de la actualidad con 7,5 millones de personas que han tenido que dejar sus casas para salvar su vida. Más de un millón son ya refugiados más allá de sus fronteras y la mitad han llegado a un país muy difícil como Chad, donde el colectivo massalit denuncia una limpieza étnica a través de un informe de Médicos sin fronteras.
Alrededor de 50 personas han muerto y otras 300 han resultado heridas en las violentas protestas en Yamena, la capital de Chad. Las prohibiciones previas no han sido suficientes para detener a los manifestantes que exigían unas elecciones democráticas ante la consolidación del presidente interino. Las fuerzas armadas del país han respondido usando la fuerza contra los civiles.
Dimisión de la primera ministra británica, Liz Truss, tras sólo 45 días en el cargo. Lo analizamos con nuestra corresponsal en Londres, Sara Alonso, y con Christopher Tulloch, Doctor en Periodismo y Comunicación de la Universitat Pompeu Fabra. Consultas en torno a la formación de gobierno en Italia. Primera jornada del Consejo Europeo sobre la energía. La salud mental en Yemen. Chad, Ucrania o Perú, y mucho más.
Varios muertos en Kiev tras ataques con drones suicidas por parte de Rusia. Hablamos con un profesor de español en Kiev, Maxim, que nos cuenta cómo ha vivido el ataque. Reunión de ministros de Exteriores de la UE en Luxemburgo, aprobación mças ayuda militar y económica para Ucrania. Irán y sus protestas. Entrevista sobre la situación de la economía de China con Eva Perea, de la Universitat Abart Oliba CEU.
Entre las 24 películas que compiten esta año en el Festival de Cannes hay dos que hablan de mujeres africanas. La marroquí "Casablanca Beats" es la historia de un grupo de jóvenes raperas. Desde Chad llega "Lingui", sobre el estigma de ser madre soltera y el modo en que las mujeres se ayudan para sortear las imposiciones de la sociedad machista.
Tras la muerte del presidente Idriss Déby el pasado mes de abril, Chad atraviesa una compleja transición de incierto final. En el país africano, un gobierno de transición tutelado por los militares, en lugar de por el Parlamento como manda la Constitución chadiana, dirige el proceso. Lo lidera por el hijo del fallecido Déby. Los opositores han puesto en marcha violentas protestas, pero la Junta militar cuenta con el apoyo de Francia que, junto con otros países europeos, quiere mantener la estabilidad del pais africano a toda costa. Nos da más detalles Aurora Moreno, en este reportaje.
El presidente de Chad, Idriss Déby, ha muerto debido a las heridas recibidas en combates contra rebeldes del Frente para la Alternancia y la Concordia en Chad (FACT) en el norte del país. Desde hace días, estos rebeldes chadianos se enfrentan al Ejército en el norte del país con la intención de derrocar a Déby. El presidente fallecido, de 68 años, solía vestir su uniforme militar para dirigir a las tropas en la lucha contra los rebeldes. En los últimos combates habrían muerto unos 300 terroristas, según cifras oficiales del Ejército chadiano.
Tan solo 24 horas antes se habían conocido los resultados de las elecciones en las que Idriss Déby había ganado por mayoría aplastante para un sexto mandato. El hijo del presidente, que también pertenece al Ejército, dirigirá un consejo militar de transición durante los próximos 18 meses. Según medios locales, tanto la Constitución, como el Parlamento y el Gobierno ya han sido disueltos.
FOTO: Thomas COEX / AFP
Theresa Berthold, coordinadora del proyecto de la Unidad de Respuesta a Emergencias Chad de Médicos Sin Fronteras (MSF), detalla cómo se articula la lucha contra la enfermedad. En la magen, tres hermanas acuden juntas a vacunarse de sarampión en el pueblo de Almourai, en el distrito de Ablelaye (FOTO:Juan Haro).
La creación de mapas con programas on line por parte de voluntarios proporciona una herramienta muy útil a los trabajadores humanitarios en zonas que no cuentan con cartografías detalladas.
Siria, Yemen, Afganistán, la República Democrática del Congo, la República Centroafricana, Chad, Malí y Somalia despiden este 2018 sin haber dejado atrás la guerra. Siria trata de reconstruir los daños del Estado Islámico, Yemen mantiene la violencia y en Afganistán continúa con el conflicto entre los talibanes y el gobierno. Según Jesús Núñez, la Guerra Fría del siglo XXI se ha transformado en una gran competición entre potencias globales por tierra, mar, aire, espacio y ciberespacio.
El corazón de África está acostumbrado a vivir tragedias. La pobreza eterna, la falta de oportunidades y los conflictos armados han perpetrado tragedias humanitarias tan largas, que muchos no conocen otra cosa. Hoy, los cuatro países que comparten las aguas del lago Chad, Níger, Nigeria Camerún y Chad, viven una de las mayores crisis del planeta. Combinada con la sequía que ha azotado en los últimos meses la región se ha convertido en la tormenta perfecta.
Hay más de siete millones de personas en situación crítica, que necesitan ayuda según las agencias de las Naciones Unidas. Entre Nigeria, Níger, Chad y Camerún hay más de 2,4 millones de personas desplazadas en su propio país, o refugiadas más allá de sus fronteras.
La región del lago Chad vive una crisis humanitaria con miles de refugiados que huyen de los yihadistas de Boko Haram
