Enlaces accesibilidad
arriba Ir arriba

El Consejero Delegado del Grupo Santander Alfredo Sáenz ha preferido no esperar a conocer la decisión del Banco de España en el proceso de revisión de su honorabilidad tras la anulación parcial del indulto concedido por el anterior Gobierno y hoy,la Comision Nacional del Mercado de Valores ha anunciado que Saenz ha presentado "la renuncia voluntaria a sus cargos de vicepresidente y consejero delegado" del primer banco de la zona euro (29/04/13).

Alfredo Sáenz Abad ha comunicado al consejo de administración del banco la renuncia voluntaria a sus cargos de vicepresidente segundo y consejero delegado de la entidad, con lo que deja de formar parte del consejo, según ha informado este lunes el Santander a la Comisión Nacional del Mercado de Valores. En estos momentos, el Banco de España estaba estudiando si debía inhabilitarse a Sáenz, después de que el Supremo anulara parte del indulto concedido por el Gobierno de Zapatero al banquero.

Según distintos cálculos, entre 700.000 y un millón de personas han visto atrapados miles de millones de sus ahorros -32.000 millones en 2010-, en un producto financiero complejo que no entendían porque nadie les explicó: las participaciones preferentes que empezaron a ofrecer bancos y cajas en los tiempos de bonanza.

Durante el pinchazo de la burbuja inmobiliaria y financiera se convirtieron en un método rápido para capitalizar sus arcas vacías y acumular las reservas que les exigían desde el Gobierno y desde Bruselas. El perfil del cliente atrapado es el de persona mayor, jubilados que invierten sus ahorros en lo que les recomendaron en la sucursal de su banco o caja de toda la vida.

Destapado el pastel, cada entidad ha dado un tratamiento distinto a sus clientes. La Caixa ofreció cambiarlas por un combinado de bonos y deuda a largo plazo. El BBVA las canjeó por bonos convertibles en acciones cotizadas en bolsa. El Santander las canjeó íntegramente por acciones.

Ahora quedan pendiente las de Bankia y otros bancos nacionalizados. El Gobierno se comprometió a darles una solución que pasará por asumir pérdidas.

El Tribunal Supremo ha anulado los efectos administrativos -la cancelación de antecedentes- del indulto al consejero delegado del Santander, Alfredo Sáenz, que le concedió el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero y que estableció que no le podía afectar ningún "impedimento para ejercer la actividad bancaria". Se trata de una estimación parcial, decidida de manera unánime por el Supremo, del recurso presentado que anula los efectos administrativos del indulto, pero que la mantiene en su parte penal.