El Gobierno ya tiene gran parte de los datos que pidió a las operadoras eléctricas para saber por qué la península se fue a negro. Una información de las horas previas y posteriores al apagón que deben servir para encontrar el origen del problema. Se sabe que hubo dos oscilaciones en pocos segundos.
Lo que lleva de cabeza a los investigadores es averiguar por qué no funcionó el cortafuegos tras el primer parón. Según fuentes del Ministerio de Transición Ecológica, la caída de la generación en el suroeste peninsular de 15 gigavatios superó todos los controles del sistema.
Se habla de que en Red Eléctrica no pudieron ajustar la oferta y la demanda y eso habría desestabilizado la red, pero los expertos recuerdan que todo se gestiona en tiempo real.
Transición Ecológica apunta también que todo está registrado, pero tienen que analizar milésimas de segundo para saber el origen del apagón, algo que puede tardar días. Alaba, eso sí, la rapidez con la que se reactivó todo el sistema eléctrico.
La hora de la 1