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Un tribunal egipcio ha confirmado la pena de muerte a, al menos, 183 seguidores de los Hermanos Musulmanes. Entre ellos, está el líder espiritual del grupo, Mohamed Badía. Se les juzgaba por el ataque a una comisaría, en el que murieron varios policías, el pasado mes de agosto. Ocurrió después de que las fuerzas de seguridad desmantelaran los campamentos que los partidarios de Mursi habían levantado para reclamar la vuelta del presidente elegido en las urnas. Mohamed Badía tiene pendiente de confirmación otra pena de muerte. 

Este domingo el ministro de Defensa, Pedro Morenés, inicia un viaje a la República Centroafricana, país en el que España está presente con una misión militar integrada en una operación de la UE. Hablamos de la situación en este país y en la región con el teniente coronel Jesús Díez Alcalde, analista del Instituto Español de Estudios Estratégicos.

Polémica en Marruecos por la difusión de unas fotos del rey Mohammed VI, en vaqueros y actitud muy espontánea, en un reciente viaje a Túnez. Son imágenes que los marroquíes difícilmente ven. La televisión pública ha tenido que pedir disculpas por emitirlas. En Internet, sin embargo, las fotos siguen arrasando. Le tocó pedir disculpas al presentador del informativo de la tarde y no se anduvo con rodeos, “el ministerio de Protocolo y Condecoraciones reales nos ha llamado la atención por usar fotos de su majestad en actividades privadas y nos comprometemos a que no se repita” apuntó. Son fotos nada comprometedoras del rey posando en vaqueros y sombrero por las calles de Túnez, similares a las que se han difundido en otros viajes por África o en sus visitas periódicas a París pero que nunca se producen en Marruecos. 

 El ministro de Exteriores de Uganda, Sam Kutesa, fue elegido presidente de la Asamblea General de la ONU, un nombramiento envuelto en la polémica por las leyes contra los homosexuales aprobadas en su país. La polémica no ha impedido a Kutesa acceder al cargo, para el que contaba con el respaldo de los países africanos, a los que correspondía ocupar el puesto.

Miles de niñas de entre 9 y 18 años se ven obligadas a casarse por la tradición, la religión y la pobreza. Asociaciones de derechos humanos piden que se eleve la edad mínima obligatoria a los 18 años y que no haya excepciones ni siquiera con autorización judicial. A día de hoy, los jueces aprueban el 85% de las solicitudes de matrimonios precoces.