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Turismo rural

El valle de Àger: el rincón de Lleida donde agricultura y astronomía van de la mano

  • El valle de Àger combina la actividad agrícola con la astronomía en el Parc Astronòmic del Montsec
  • Un paraje natural para recorrer a pie en barco o kayak: el Congost de Montrebei
  • Un reportaje de Agrosfera, los sábados a las 10.00 horas en La 2 de TVE

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Vista general de Àger, Lleida
Vista general de Àger, Lleida

Con la Sierra del Montsec al fondo y limitado por los embalses de los ríos Noguera Pallaresa y Noguera Ribagorzana, los cultivos de cereal se extienden por el Valle de Àger La agricultura y la ganadería han sido las actividades tradicionales en la llanura. Ahora conviven con el turismo cultural, de naturaleza y científico con unos cielos que le permiten ser uno de los diez destinos 'starligth' de España, aquellos con las cualidades idóneas para la contemplación de estrellas.

El cereal y la ganadería, bases de la economía tradicional de Àger

Los cultivos de cereal, con el almendro y el olivo, forman parte inseparable del paisaje del valle. Aunque la agricultura va cediendo terreno a otras actividades, algunos jóvenes siguen incorporándose al campo.

Cultivos en el valle de Àger

Cultivos en el valle de Àger

Vivir de la agricultura solo cuesta mucho. Tienes que acompañarlo con una granja, con otra actividad

Emilio, a sus 19 años, es el último: "Desde bien pequeño me gustaba lo del tractor, podar árboles y poder ser dueño de tu horario... merece mucho la pena. Pero vivir de la agricultura solo cuesta mucho. Tienes que acompañarlo con una granja, con otra actividad"

Para iniciar la actividad Emilio se enfrenta con problemas como la burocracia en los despachos para poder legalizar su explotación, heredada de sus padres. Y en el campo con la abundancia de corzos y jabalíes.

"Por aquí, solo para cuatro granos ha pasado toda la camada de jabalí y ha pisado toda esta cantidad de trigopunto ya de cosechar", dice mientras enseña un amplio círculo de espigas aplastadas.

Un jabalí al anochecer en los cultivos de Àger

Un jabalí al anochecer en los cultivos de Àger

El Parque Astronómico del Montsec, una mirada al Universo

La agricultura tradicional convive con nuevas actividades en el valle, como el turismo científico en el Centro de Observación del Universo del Parque Astronómico del Montsec. "Tenemos muchas noches despejadas lo que permite que sea un sitio óptimo para la astronomía y por ello puede obtener este tipo de calificaciones de calidad", asegura Salvador Ribas, director del parque.

Parque Astronómico del Montsec

Parque Astronómico del Montsec

El centro se divide en tres partes: las salas de exposiciones del Universo, dedicada a la explicación del espacio; y la sala 'Starligth', que habla de la importancia de conservar unos cielos limpios de contaminación lumínica. El parque de telescopios que permite a los visitantes realizar observaciones diurnas del sol, por ejemplo.

Salvador José Ribas, director del PAM

Salvador José Ribas, director del PAM

"Podemos ver las manchas en su superficie o las llamaradas que salen del sol... Nuestro visitante no se espera ese hecho. Con lo cual tiene un impacto bastante notable como un descubrimiento de algo nuevo ¿no?", dice Ribas.

El Ojo del Montsec es el único planetario del mundo que puede abrir su cúpula

Y en tercer lugar, su estrella, el Ull del Montsec, un planetario para observar el universo. Para Salvador, "el Ojo del Montsec es el único planetario del mundo que puede abrir su cúpula y después de la proyección podemos ver el cielo real. De día vemos un resplandor de la luz del sol y de noche vemos cielo estrellado...".

Entre los deportes aéreos y los recorridos en tierra: el espectacular Congost de Montrebei

Los cielos limpios del valle de Àger son ideales además para los deportes aéreos. Desde la Sierra del Montsec son frecuentes los saltos en parapente o ultraligero. Varias empresas de deporte de naturaleza y aventura facilitan la actividad con centros de aprendizaje y pistas de aterrizaje en los prados que rodean la localidad.

Y en tierra, en el embalse de Canelles, el paraje natural más espectacular de Àger, el Congost de Mont-Rebei formado por el Noguera Ribagorzana y límite entre Cataluña y Aragón.

Un camino excavado en las paredes del cañón lo recorre por la parte catalana. Mientras que desde la aragonesa descienden las pasarelas de Montfalcó para unir ambos mediante un puente colgante.

Enric Maestre con el Congost de Montrebei al fondo

Enric Maestre con el Congost de Montrebei al fondo

Enric Maestre, de la empresa Montsec Activa nos conduce a bordo de su lancha por el cañón.

La aproximación es preciosa. Vas viendo lo que es la majestuosidad de lo que es el desfiladero desde lejos

"La aproximación es preciosa. Vas viendo lo que es la majestuosidad de lo que es el desfiladero desde lejos y hasta que entras puramente en el cañón. Cuando empieza a ser espectacular es cuando entras en el desfiladero de Montrebei", comenta.

El Congost de Montrebei

El Congost de Montrebei

El camino se puede hacer de muchas formas, andando, en kayak o combinando barco y paseo. Y, según la forma elegida es apto para todos. "Hemos tenido una persona que ha venido con el barco que estaba celebrando su cien aniversario... el cliente más antiguo. Hay gente que ha viajado por todo el mundo y dicen que es uno de los sitios más bonitos en los que ha estado y que no lo conocía... y que han alucinado", señala Enric.

Mas Serret, una masía sobre una ermita del siglo XI convertida en casa rural

Las masías son también parte del paisaje de Àger. Mas Serret, levantada sobre los restos de una ermita románica del siglo XI, es ahora uno de sus alojamientos rurales.

Cristina Masvidal en Mas Serret

Cristina Masvidal en Mas Serret

Cristina Masvidal, su propietaria, explica su filosofía: "Hay que conservar el máximo que se puede de la historia de la casa a través de sus paredes, de sus suelos, para poner en valor esa historia y lo que representaban las masías para el campo antiguamente, que eran importantísimas".

Hay que conservar el máximo que se puede de la historia de la casa para poner en valor esa historia

"Hay cuatro habitaciones, -continúa Cristina- un máximo de doce personas de capacidad, mucha tranquilidad, una atención personalizada a todos nuestros clientes. Las habitaciones son amplias, tienen su baño, su tele, su calefacción, conservando ese aire antiguo, ese aire rústico". Y junto a ello sus espacios comunes, sala de descanso, porche y jardín. "La mayor parte de nuestros clientes acaban diciendo hemos estado como en casa... Como en casa", concluye.

Casa rural Masía Serret

Casa rural Masía Serret

Casa Xalets, una gastronomía con los sabores de la tierra

Complemento del alojamiento, una cocina basada en los productos más cercanos que ofrece la tierra. Jordi Casanoves nos muestra un ejemplo: "El plato que voy a hacer es conejo con caracoles al gusto de romaní. Lleva conejo, caracoles, una picada de cebolla, romero, una picada de almendras con chocolate y sal y pimienta y aceite".

Jordi en la cocina

Jordi en la cocina

"En una cazuela, en frío, se pone la cebolla con los caracoles, ¿por qué?, porque a los caracoles les cuesta mucho salir. En otra sartén se pone el conejo salpimentado, se mezclan y se va haciendo, 'chup, chup'... y ya está", comenta. El comedor de Casa Xalets ofrece unas vistas inmejorables del valle de Àger. Un lugar ideal para que Txus Hervera nos presente su menú: "Aquí os presento el plato, conejo con caracoles al aroma de romaní, Lo acompañamos con un vino de la zona, una ensaladita fresca que es lo que apetece más con platos un poco más fuertes y después un postre típico de aquí de la zona, que es pan con chocolate negro, sal y aceite". ¡Gracias Txus!

Txus presentando el menú de Casa Xalets

Txus presentando el menú de Casa Xalets

Conejo con caracoles al aroma de romaní de Casa Xalets

Conejo con caracoles al aroma de romaní de Casa Xalets

Àger, una población nacida con la Reconquista en el siglo XI

Poblado desde la prehistoria, Àger tiene sus orígenes en la Reconquista, en el siglo XI. El caballero Arnau Mir de Tost, los restos de cuyo sepulcro se conservan en la iglesia de San Vicente, construye una fortaleza románica sobre una alcazaba andalusí.

La colegiata de Sant Père

La colegiata de Sant Père

Nuria Fraga, informadora turística del ayuntamiento de Àger, realiza las visitas guiadas por el conjunto al que da nombre la iglesia de Sant Pere.

Sant Père tendría diferentes tipos de vida: militar, monástica y civil

"Tendría diferentes tipos de vida. Vida militar alrededor de una gran torre de defensa, la más grande encontrada en Cataluña, aunque solo se conserva la base. La vida monástica, la vida religiosa alrededor de este gran claustro... ya no es el románico original, es un gótico posterior del siglo XVI. La vida civil se desarrollaría ya en el castillo, un castillo típico de frontera, románico, con planta rectangular. La iglesia por supuesto, una gran iglesia, la iglesia de Sant Père de Àger y la cripta. Justo debajo de la iglesia encontramos la cripta de Sant Père de Àger", explica.

Interior de la iglesia Sant Père

Interior de la iglesia Sant Père

En el recinto se encontró uno de los vestigios de su pasado andalusí, nos muestra Nuria: "Son piezas de un juego de ajedrez andalusí. El original tallado en cristal de roca, de arte fatimí, fabricado en El Cairo, en Egipto. Pertenecían a Arsenda, a la mujer de Arnau Mir de Tost. Lo sabemos por su testamento".

Nuria en el conjunto de Sant Père

Nuria en el conjunto de Sant Père

Y bajo la colegiata de Sant Père, el barrio más antiguo de Ager con sus características calles cubiertas. "Explican un poquito la forma de vivir el máximo tiempo posible al interior de la muralla para estar protegidos. Aprovechando los espacios estrechos pues construir edificaciones encima. Por eso tenemos muchos soportales en el municipio de Àger", dice Nuria.

Calles techadas del barrio antiguo de Àger

Calles techadas del barrio antiguo de Àger

Calles que conservan las huellas de los siglos y que hoy invitan a continuar el paseo por su historia. Lo descubrimos en el programa de Agrosfera.