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El delegado del Gobierno en el País Vasco aboga por abrir una 'vía Nanclares 2' para etarras arrepentidos

  • Jesús Loza lo manifestaba en una entrevista y matizaba, en un comunicado, que es una opinión y que no habrá vía Nanclares 2
  • En sus declaraciones decía que podría consistir en un acercamiento progresivo a Zaballa y la posibilidad de terceros grados

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Cartel con el lema "Presos y refugiados vascos a casa", en Bilbao, en una imagen de archivo
Cartel con el lema "Presos y refugiados vascos a casa", en Bilbao, en una imagen de archivo.

El delegado del Gobierno en funciones en el País Vasco, ha abogado este jueves por la posibilidad de que el Ejecutivo de Pedro Sánchez abra un camino de reinserción para etarras arrepentidos que hagan "una autocrítica real", a través de una Vía Nanclares 2 para los presos de ETA tras las elecciones generales del 10 de noviembre. Unas declaraciones que después ha rectificado asegurando que se trata de una "reflexión" y que no hay abierta "ninguna vía Nanclares ni previsiones en esa línea".

Loza aseguraba en declaraciones a la cadena SER, que el gobierno puede "establecer de cara a futuro la posibilidad de que se abra una vía Nanclares 2 o una Vía Zaballa (la nueva cárcel del pueblo de Nanclares) para que esos presos puedan reinsertarse, pero se encuentran con que el mundo del EPPK y el mundo de la izquierda abertzale en general les ha marcado dos líneas rojas: la delación y el arrepentimiento". "La delación no es obligatoria, pero la autocrítica es fundamental", señalaba el delegado del Gobierno.

Además, expresaba su confianza en que la comunidad de los presos y sus familiares reaccionaran tras el acuerdo al que los propios abogados del colectivo de presos EPPK habían llegado en el juicio contra el frente de cárceles, en el que pactaron y se declararon culpables para evitar la cárcel.

Los presos salen "infinitamente mejor" en lo personal

El delegado del Gobierno aseguraba que tiene "indicios" de que hay presos de ETA que estarían interesados en acogerse a esa nueva vía Nanclares, pero recordaba que en todo caso al no haber "un gobierno constituido" se haría después de las elecciones generales si el PSOE siguiera gobernando. "Se está trabajando para que cuando lo haya (el gobierno) se pueda poner en marcha rápidamente", precisaba.

En relación a la metodología de esa posible vía Nanclares 2, Loza explicaba que se haría constando que la autocrítica es "real y no solo un mero papel" y que sería muy parecida a la desarrollada hasta ahora: "Habría un acercamiento progresivo con llegada a Zaballa y después toda la reflexión que tienen que hacer ellos con la posibilidad de paso a terceros grados o libertades condicionales".

También aseguraba el responsable del Ejecutivo en el País Vasco que la experiencia que se tiene es que los presos que se acogieron en su día a la Vía Nanclares salen en lo personal "infinitamente mejor" que el resto, y ha subrayado el papel que estos presos de ETA reinsertados pueden jugar a favor de la convivencia.

Loza se disculpa y asegura que se trata de una "reflexión"

Después, a través de un comunicado, Loza ha matizado sus palabras asegurando que "ningún delegado" del Gobierno puede poner en marcha "ninguna vía Nanclares" y que no ha sido esa su intención, porque la política penitenciaria "la dirige, y con gran acierto, el Ministerio del Interior y ha estado y estará siempre en el marco de la legalidad española".

El responsable del Ejecutivo en el País Vasco se disculpa por si alguien se ha podido molestar por sus palabras y explica que su "reflexión" se produce "desde la experiencia de años pasados de trabajo en materia penitenciaria" y desde "la sensibilidad de alguien amenazado por ETA que busca que ese mundo realice una autocrítica de su pasado, como elemento básico para construir una convivencia en paz y en libertad".

Concluye su comunicado asegurando que su "compromiso" en la lucha contra el terrorismo y "en apoyo a sus víctimas" viene de antiguo, y que seguirá siendo "el espíritu" que guíe su actuación.

La Vía Nanclares recibe su nombre de la prisión alavesa en la que con el Gobierno socialista de José Luis Rodríguez Zapatero fueron agrupados los etarras que decidieron desvincularse de la banda, pedir perdón por sus crímenes y comprometerse a pagar la responsabilidad civil a sus víctimas. Fue abandonada con el Gobierno de Rajoy.