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A bordo del Open Arms

Desembarcan a los 27 menores no acompañados del Open Arms pese a las reticencias de Salvini

  • El ministro italiano denuncia que "mientras Madrid no mueve un músculo, las presiones se multiplican sobre Italia"
  • La Justicia italiana ordena una inspección médicas para constatar las condiciones higiénico-sanitarias del barco

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Italia permite que desembarquen los 27 menores no acompañados del Open Arms

La Guardia Costera y la Guardia de Finanzas italiana han desembarcado este domingo a los 27 menores no acompañados a bordo del barco Open Arms, donde aún continúan 107 personas más a bordo. Los menores han sido transferidos en dos lanchas motoras a Lampedusa, bajo la supervisión del fiscal adjunto de Agrigento (Sicilia), Salvatore Vella, a pesar de las reticencias del ministro de interior italiano Matteo Salvini.

Los representantes de la ONG española había denunciado horas antes estar en "una situación desesperada" después de 16 días esperando un puerto en el que atracar. Esto ha motivado reiteradas peticiones del primer ministro italiano, Giuseppe Conte, para desembarcar a las personas a bordo y el aumento de la presión sobre Salvini.

A pesar del desembarco, el ministro ultraderechista ha reiterado que su posición respecto al Open Arms no ha cambiado y ha denunciado que "mientras Madrid no mueve un músculo, las presiones se multiplican sobre Italia".

Justo antes de abandonar el barco, los menores se han despedido de la tripulación que los rescató del Mediterráneo con muestras de cariño, como puede verse en un vídeo publicado en la cuenta de Twitter de Oscar Camps. Los que se quedaban a bordo los han despedido con aplausos.

La justicia italiana ordena una inspección médica en el Open Arms

Mientras, la justicia italiana ha ordenado una inspección médica en el Open Arms para constatar las condiciones higiénico-sanitarias en que se encuentran los migrantes a bordo después de más de dos semanas hacinados en cubierta.

La orden ha sido dada este sábado por la Fiscalía de Agrigento (Sicilia), que desde la víspera investiga por un presunto delito de secuestro de personas -contra nadie en concreto- y los médicos encargados verificarán especialmente el estado de los menores.

Todo ello después de que la nave de la ONG española se declarase este sábado "en situación de necesidad", mientras Salvini mantiene su prohibición a que el barco atraque en un puerto del país pese a que un tribunal italiano dejó sin efecto esa orden.

El fundador de la ONG Open Arms, Oscar Camps, ha lanzado un llamamiento desesperado para que Italia permita desembarcar a los 134 migrantes abordo de su barco, al no poder garantizar su seguridad y ante el temor de que se produzca un motín, y dijo que tanto los rescatados como la tripulación están "secuestrados". "La situación está fuera de control. Escapa a nuestra capacidad", aseguró Camps en un vídeo hecho desde una lancha frente al buque Open Arms, que se encuentra justo a las costas de la isla italiana de Lampedusa. El máximo responsable de esta ONG española ha comunicado también esta situación a presidente del Gobierno español en funciones, Pedro Sánchez, a la canciller alemana, Angela Merkel, al presidente francés, Emmanuel Macron, y al del Parlamento Europeo, David Sassoli, y a "todas las autoridades italianas".

El barco se encuentra fondeado junto a las costas de Lampedusa desde hace dos días sin que se haya autorizado el desembarco de todos los migrantes, mientras la tripulación denuncia el deterioro de la situación a bordo.