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CaixaBank cerrará más de 800 oficinas de su red urbana hasta 2021 y mantendrá las que tiene en las zonas rurales

  • CaixaBank reconoce que habrá un "excedente de plantilla" y los sindicatos advierten de que no aceptarán despidos
  • La entidad financiera pasará de 4.461 sucursales en 2018 a dejarlas por debajo de 3.640 en 2021

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Sede operativa de Caixabank en la Avenida Diagonal de Barcelona
Sede operativa de Caixabank en la Avenida Diagonal de Barcelona.

CaixaBank cerrará más de 800 oficinas en los próximos tres años pasando de las 4.461 con las que terminará este 2018 hasta dejarlas por debajo de 3.640, según las cifras del Plan Estratégico 2019-2021 que ha presentado este martes en Londres y que prevé que la entidad financiera alcance una rentabilidad superior al 12% en este periodo. Los sindicatos ya han avisado al banco -que reconoce que habrá un "excedente de plantilla"- de que no aceptarán despidos, solo salidas voluntarias.

El banco centrará el cierre de sucursales solo en las ciudades mientras mantendrá intacta su red en las zonas rurales, donde actualmente cuenta con unas 1.100 oficinas en municipios de menos de 10.000 habitantes, según han explicado a RTVE.es fuentes de CaixaBank, que insisten en que "igualmente" contarán con la red física "más extensa" de España.

En las ciudades se potenciará el modelo Store de oficina, enfocada en la atención personalizada al cliente y con un horario de apertura más amplio, según informa Efe. El objetivo de CaixaBank es pasar de las 285 previstas al cierre de este ejercicio hasta superar las 600. También intensificará el modelo de atención remota inTouch hasta alcanzar 2,6 millones de clientes desde los 600.000 actuales.

CaixaBank reconoce que habrá un "excedente" de plantilla

La transformación de la red tendrá como resultado "optimizar la red urbana", "mantener la red rural" y "operar con menos plantilla", recoge la presentación sobre el Plan Estratégico enviada a los medios. CaixaBank ha cerrado ya cerca de 900 oficinas desde 2014, cuando contaba con 5.358.

"Va a resultar un excedente de plantilla en el que buscaremos negociar con los representantes de los trabajadores la mejor manera de hacerle frente", ha declarado el consejero delegado de CaixaBank, Gonzalo Gortázar, en una rueda de prensa recogida por Efe.

Ante este anuncio, los sindicatos de CaixaBank temen que el banco presente un ERE para llevar a cabo el ajuste y avisan den que no aceptarán salidas forzosas de personal, solo salidas voluntarias, según la opinión recabada por esta misma agencia de noticias.

Los representantes de los trabajadores cifran en más de 3.000 personas las que pueden trabajar en las más de 800 oficinas que se quieren cerrar y muestran su preocupación porque con los ajustes de los últimos años no hay tanta gente en edad de prejubilación. Actualmente trabajan 32.000 personas en CaixaBank entre oficinas y servicios centrales.

Una rentabilidad superior al 12% en los tres próximos años

El presidente de la CaixaBank, Jordi Gual, y el consejero delegado, Gonzalo Gortázar, han sido los encargados de presentar en Londres las líneas básicas del Plan Estratégico 2019-2021, que se ha elaborado en un escenario de un crecimiento económico de alrededor del 2% anual tanto en España como en Portugal y de una subida "muy gradual" de los tipos de interés.

El plan se basa en cinco líneas fundamentales: ofrecer la "mejor experiencia" al cliente, acelerar la transformación digital para ser "más eficientes y flexibles", potenciar una cultura centrada en las personas, "ágil y colaborativa", generar una rentabilidad atractiva, manteniendo la solidez financiera y ser referentes de gestión responsable y compromiso con la sociedad.

El objetivo es acabar 2021 con una rentabilidad (ROTE) por encima del 12% o del 10% en cado de que los tipos de interés se mantengan planos.

El banco se propone además incrementar sus ingresos "core", reducir sus activos financieros no estratégicos, situar la ratio de morosidad por debajo del 3% y mantener una política de dividendo atractiva para los inversores, con un objetivo de "playout" (porcentaje del beneficio que se destina a dividendos" por encima del 50%, informa Efe.

Gortázar ha asegurado que quieren "consolidar un grupo financiero líder e innovador, con el mejor servicio al cliente y un referente en la banca socialmente responsable" mientras que Gual ha subrayado que el plan pretende "generar valor de manera sostenible" para clientes, accionistas, empleados y el conjunto de la sociedad, según recoge la entidad en una nota de prensa.