Evacúan a los pasajeros del AVE Marsella- Madrid por un incendio en la locomotora de cola

• El fuego se ha producido a 200 metros de la estación de Lunel, Francia
• Renfe confirma a RNE que todos los pasajeros se encuentran bien
• El tráfico ferroviario ha tenido que ser interrumpido

Todos los pasajeros del tren incendiado ya están en España

Alrededor de 250 pasajeros del AVE Marsella- Madrid han tenido que ser desalojados la mañana de este domingo al producirse un incendio en la locomotora del tren de la parte de la cola.

Renfe ha confirmado a Radio Nacional que todos los pasajeros se encuentran en buen estado de salud. No obstante, siete personas han necesitado ser atendidas por cortes en las manos y en los pies provocados por los cristales de las ventanas de los vagones, que han roto los viajeros para salir al exterior. Dos de los heridos han sido trasladados a un hospital para recibir varios puntos de sutura en sus heridas.

El fuego se ha producido cuando el tren había recorrido unos 150 kilómetros y se encontraba a 200 metros de la estación de Lunel, Francia, en torno a las 9.30 horas, según informa el periódico ledauphine en su página web.

Las fuentes de la SNCF indicaron que el fuego solo afectó a la última locomotora y que se desconoce las razones que lo desencadenaron, cuya investigación, añadieron, depende de la compañía española Renfe, como propietaria de ese tren.

La vía férrea ha sido cortada en ambos sentidos hasta que se ha retirado el tren, lo que ha provocado retrasos en el servicio. Los viajeros evacuados han sido trasladados a Mompelier por carretera, desde donde se les ha derivado a sus respectivos destinos.

Los pasajeros han vuelto a España

La compañía ferroviaria francesa SNCF puso a disposición de los pasajeros afectados por el incidente un TGV que les ha llevado hasta Figueras (Gerona), donde el AVE incendiado debía hacer su primera parada comercial y donde han descendido una veintena de viajeros.

El resto de pasajeros continuó su viaje en otro tren de alta velocidad español, que ha llegado a la estación de Barcelona-Sants a las 18:15 horas, ha informado la compañía Renfe.

Tras descender del AVE en la estación barcelonesa, varios pasajeros explicaron, en declaraciones a los periodistas, que en los dos últimos vagones del convoy, los más cercanos al fuego, no se podían abrir las puertas y que algunos viajeros sintieron pánico y optaron por romper los cristales de las ventanas para poder salir.

Andrés García Martínez ha indicado que "la gente estaba un poco agobiada, al ver la humareda negra" y que "ha habido bastante pánico" mientras Piero, un viajero italiano, ha coincidido en que se han dado situaciones de "pánico, de miedo" hasta que se han abierto las puertas del vagón.

“"No podíamos salir y no sabíamos nada de lo que sucedía, ni siquiera las azafatas del tren"“

Otra viajera, Pilar Sopeña, ha añadido que la situación ha sido "caótica": "No podíamos salir y no sabíamos nada de lo que sucedía, ni siquiera las azafatas del tren", y otra viajera, de nombre Leyre, ha señalado que se oía un pitido de alarma, pero que no tenían información sobre lo que estaba pasando.

Al abrirse las puertas del AVE, los pasajeros han recorrido a pie, por las vías, la distancia que les separaba de la cercana estación de Lunel.

Precisamente, de la estación barcelonesa de Sants, ha salido a las 18.30 horas de hoy otro AVE, que tiene previsto llegar a Madrid sobre las 21.45 horas, para los pasajeros con destino Camp de Tarragona, Zaragoza y la capital de España.

En la estación de Camp de Tarragona se prevé que bajen siete viajeros, en Zaragoza descenderán una decena y Madrid será el destino final de 56 usuarios.