La Defensora del Pueblo remite una carta a la Comisión Europea en favor de la 'doctrina Parot'

• Este miércoles el Tribunal de Estrasburgo examinará la 'doctrina Parot'
• Becerril muestra su preocupación por el dolor de las víctimas de terrorismo

La Defensora del Pueblo, Soledad Becerril, informó este martes de que ha remitido una carta a la Comisión Europea en favor de la "doctrina Parot" y en la que defiende que se tenga en cuenta a las víctimas de terrorismo y el dolor que han sufrido.

El Tribunal de Derechos Humanos de Estrasburgo examinará este miércoles el recurso presentado por España contra la derogación de la "doctrina Parot en el caso de la terrorista Inés del Río, condenada a más de 3.000 años por 23 asesinatos, entre otros delitos.

Como  "doctrina Parot" se conoce la jurisprudencia establecida a partir de la  sentencia del Tribunal Supremo en 2006 a un recurso presentado por el  miembro de ETA Henri Parot, por la cual la reducción de penas por beneficios penitenciarios se aplica respecto a cada una de las condenas individualmente y no sobre el máximo legal de 30 años de permanencia en prisión, con lo que se alarga la estancia en la cárcel.

La misiva de Becerril está dirigida al comisario europeo de Derechos Humanos, Nils Muiznieks,  al que muestra su "preocupación" por la decisión que puedan tomar los jueces comunitarios sobre este tema.

En este sentido, la Defensora ha trasladado a Muiznieks que la decisión que tome el Tribunal de Estrasburgo es de "extraordinaria importancia para España y, particularmente, para las víctimas del terrorismo y de otros crímenes, cuyo dolor y preocupación comparte totalmente".

Una decisión de "extraordinaria importancia" para las víctimas

Becerril argumenta que la interpretación que el Tribunal Constitucional hizo de la "doctrina Parot" tiene en cuenta "a las muchas víctimas que han sufrido daños y pérdidas irreparables y no es contraria a los derechos humanos".

Por este motivo, esta representante de los ciudadanos cree necesario "aunar esfuerzos para reconciliar la interpretación de los derechos humanos con el profundo anhelo de justicia de la inmensa mayoría los españoles".

Por último, la Defensora subraya en su carta que hace estas observaciones "desde el respeto a los derechos de las personas privadas de libertad, pero teniendo muy en cuenta la necesidad de reparación de las víctimas de gravísimos delitos que han destrozado familias y además, en el caso del terrorismo, tratado de condicionar la sociedad democrática".