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La fiscalía de Copenhague pide 60 días de prisión para Uralde y otros miembros de Greenpeace

  • Están acusados de allanamiento y suplantación de identidad, entre otros
  • El ex director de Greenpeace España fue detenido durante la Cumbre del Clima
  • López de Uralde se ha mostrado "globalmente contento" con la propuesta

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VISTA FINAL DEL JUICIO CONTRA URALDE POR IRRUMPIR EN LA CUMBRE CLIMÁTICA
El español Juan Lopez de Uralde (en el centro) posan junto a otros miembros de Greenpeace frente a los juzgados de Copenhague en la vista final del juicio por irrumpir en un acto de la cumbre climática mundial en 2009.

El exdirector de Greenpeace España Juan López de Uralde y otros tres miembros de este colectivo ecologista pueden ser condenados por un tribunal de Copenhague a un máximo de 60 días de cárcel en régimen de libertad condicional por irrumpir en un acto de la cumbre climática mundial, en 2009, pero se espera que no cumplan condena porque ya estuvieron en prisión preventiva 20 días.

Esa es la pena solicitada por la fiscalía encargada del caso, que propuso también una multa de unos 3.000 coronas danesas (unos 400 euros) para cada uno de ellos y que se les prohíba pisar suelo danés durante los próximos seis años.

López de Uralde, que permaneció en prisión preventiva 20 días y fue liberado con cargos, al igual que sus compañeros, se ha mostrado "globalmente contento" con la noticia.

El tribunal de Copenhague deberá dictar sentencia el lunes próximo contra los cuatro miembros de Greenpeace, acusados de allanamiento de morada (agravado por una ofensa a la reina Margarita II, anfitriona de la gala en la que irrumpieron), suplantación de autoridad publica y falsificación documental.

Durante la primera vista hace dos meses, la defensa pidió la libertad de los imputados y la anulación del proceso, con el argumento de que se trató de una protesta para forzar un acuerdo en la cumbre.

Allanamiento, suplantación y falsificación

Todos los acusados se declararon inocentes de los cargos que se les imputan, si bien admitieron su participación en los hechos, que justificaron en la inminencia de un fracaso de la cumbre, como así sucedió finalmente.

La fiscalía incidió en que los acusados falsificaron matrículas de coches y papeles para acceder a la gala.

López de Uralde y otros tres compañeros de Greenpeace -un suizo, una noruega y un holandés- burlaron el 17 de diciembre de 2009 la seguridad de la cena de gala de la cumbre, a la que asistieron un centenar de dirigentes políticos, haciéndose pasar por "jefe de Estado de la Madre Tierra", su esposa, un escolta y el chófer.

A la entrada del banquete, desplegaron una pancarta delante de las cámaras de la televisión pública danesa DR con el lema "Los políticos hablan, los líderes actúan".

"Globalmente contento"

López de Uralde se ha mostrado "globalmente contento" con la propuesta de la fiscalía, ya que al principio del caso se hablaba de la posibilidad de una pena de prisión de hasta seis años. No obstante, ha tachado de "desproporcionado" el proceso y el papel de la acusación.

El fiscal está tratando de justificar lo que hicieron, que nos metieron en prisión preventiva

"El fiscal está tratando de justificar lo que hicieron, que nos metieron en prisión preventiva. Sabe que no es justo que vayamos a la cárcel", ha dicho López de Uralde a Efe, al término de la vista celebrada en un tribunal de Copenhague.

En su alocución final en el juicio, el exdirector de Greenpeace España ha recordado que las ONG fueron expulsadas de la cumbre del clima de Copenhague de 2009 una semana después de su inicio y que se quedaron sin un foro en el que expresar sus ideas, cuando la posibilidad de un acuerdo mundial sobre el cambio climático se desvanecía.

Crimen o esperanza

"Queríamos mandarles un mensaje a los líderes y nos acercamos al lugar donde estaban reunidos. ¿Es la esperanza un crimen?", ha señalado López de Uralde, quien resalta que las emisiones de gases contaminantes siguen aumentando "y los líderes no hacen nada: ¿No será ese el verdadero crimen?", se pregunta.

Nunca pensé que acabaría en la cárcel o expulsado de Dinamarca

El exdirector de Greenpeace España aseguró que acudió a Copenhague "con la esperanza de que se lograra un acuerdo para salvar la Tierra" y añadió: "nunca pensé que acabaría en la cárcel o expulsado de Dinamarca".

Los acusados están imputados por falsificación documental, suplantación de autoridad pública y allanamiento de morada, agravado por una ofensa a la reina Margarita II, anfitriona de la cena de gala con un centenar de jefes de Estado en la que irrumpieron.